El museo Einstein funciona dentro de un túnel de 108 metros, en Rivadavia, en la zona de la Quebrada de Zonda. En su interior, fósiles de distintas épocas, objetos arqueológicos y muchos animales embalsamados forman parte de la exposición fija. Domingo Castro, encargado del museo, comentó que ahora sumará más de 100 piezas que recibió en forma de donación. Se trata de tesoros marinos prehistóricos que llegaron hasta desde EEUU. Entre estas joyas se encuentra una trilobita del mar del Caribe, un escafápodo y un gastrápodo de Filipinas y el maxilar de una ballena Franca del Sur argentino (ver aparte), entre otras cosas.

Castro contó que el museo geográfico recibió las donaciones de un investigador de Buenos Aires, que viajó por todo el mundo en el contexto de la creación de un catálogo de caracoles y moluscos, y que trajo fósiles de diferentes animales marinos que vivieron en distintas épocas. 'En su mayoría son caracoles de diferentes tamaños. Uno de los más curiosos es el escafápodo que parece un colmillo', dijo Castro y contó que está clasificándolos para poder colocarlos en las vitrinas que hay en el museo. Es que este espacio está dividido según la evolución que tuvieron los animales a lo largo del tiempo.

'Otra de las curiosidades recibidas ahora es la trilobita, que se trataba de un animal marino similar a un bicho bolita. De hecho, el fósil está medio cerrado y se puede ver la curvatura de su caparazón', dijo el especialista y comentó que estas nuevas piezas se sumarán a las más de 1.000 que ya tiene el museo y que fue sumando a lo largo de su historia.

  • Artrópodo Trilobita

Se trata de un animal fosilizado que vivió en Utha, EEUU. Castro comentó que pertenece al periodo Devónico medio, es decir que tiene unos 390 millones de años, y estas especies se extinguieron en el periódico Pérnico, que acabó hace unos 251 millones de años. 'En San Juan se encontraron especies similares a esta. De hecho, tenemos algunas en el museo, pero son mucho más pequeñas. Es que se conocen unos 5.000 géneros distintos de trilobitas', agregó Castro.

  • Escafápodo

Se trata de un molusco que mide unos 12 cm. Dentro de ese caparazón, que tiene el nombre científico de Dentalium Vernedei, porque tiene forma de colmillo, vivía un molusco que salía para comer y se volvía a esconder. Esta nueva pieza fue traída del mar de Filipinas, pero también vivía en la zona de Japón. 'Es una pieza pequeña, pero curiosa por su forma. Cuando la gente que no conoce del tema la ve, cree que es una pieza dental', agregó Castro.

  • Gastrápodo

Tiene 30 centímetros de diámetro y pesa más de 1 kilo. Se trata de uno de los tantos caracoles que recibió Domingo Castro en forma de donación. Y es justamente el más grande de todos. Este caracol perteneció al periodo Holoceno, es decir que pueden tener hasta 9.000 años de antigüedad. Debido a que no es un elemento tan antiguo se puede trasladar sin problemas legales de un lugar a otro. 'Estos elementos tienen un valor, de catálogo, de 7.000 pesos aproximadamente', agregó.

  • Maxilar de ballena Franca

Se trata de una de las piezas más grandes que tiene en este momento el museo. El hueso mide unos 4 metros de largo y perteneció a una ballena Franca de 12 metros aproximadamente. También es del periodo Holoceno. Actualmente, esta es la única pieza que está en exposición dentro del museo Einstein, pues tuvo que ser sacada de su envoltorio apenas llegó y fue necesario buscarle un lugar por su gran tamaño. La gente ya la puede ver.