Hace un poco más de un mes que Celeste Ponce (27) duerme con sus tres hijas en el suelo. Esto se debe a que el 19 de febrero sufrió un incendio en su casa de Albardón mientras dormía con las pequeñas y salvaron sus vidas de milagro. Un cortocircuito generó chispazos, que se convirtieron en llamas en cuestión de segundos. La joven madre se despertó cuando percibió el humo y en un abrir y cerrar de ojos sacó a sus hijas del lugar, viendo cómo el fuego arrasaba con sus pertenencias.

Así quedó la vivienda después del incendio.
 

"Nos salvamos justo pero nos dijeron que ya no podíamos estar más en esa casa porque quedó inhabitable. Mi mamá nos dio un lugar; una pieza que sólo tiene las paredes. No tiene ventanas ni puerta y el techo es de nylon. Con las lluvias que hubo la pasamos muy mal", resaltó.

Celeste tiene tres hijas de 10, 8 y 2 años; a quienes tuvo que cambiar de escuela porque ya no cuenta con el sustento económico para moverse en colectivo, ya que vivía en Las Lomitas y ahora permanece en Campo Afuera. Además, la más pequeña tiene autismo y asegura que depende de ella por completo, lo cual le impide salir a trabajar.

La pieza que le prestaron y que está sin terminar.
 

"Los vecinos nos ayudaron con ropa y otras donaciones pero desde el municipio nos prometieron ayuda y solo me mandaron arena, cal y unos hierros. Mientras tanto sigo durmiendo en el suelo y rogando que no llueva o venga un ventarrón porque sino se me vuela todo", indicó.

La mamá de las tres pequeñas reveló que la anterior vivienda también se la prestaron pero le advirtieron que era un lugar muy viejo y que tuviera cuidado. "Lo que más temía pasó pero me quedé una semana ahí y tuve que irme porque se iba a venir el techo abajo. Ahora sigo en las mismas condiciones", sentenció.

El techo que improvisó para resguardarse.