En la última semana, vecinos de la zona de Circunvalación y 9 de Julio, en Capital, se vieron conmocionados luego de encontrar en dos oportunidades elementos pertenecientes a algún tipo de ritual. De inmediato lo vincularon a una brujería. Sin embargo, un pai umbanda consultado por DIARIO DE CUYO indicó que esos elementos forman parte de una ofrenda para pedir bienestar.

“Eso en realidad es una ofrenda para un santo de la religión umbandista, para un orixá, los santos dentro de lo umbanda se llaman orixás. Es más precisamente una ofrenda de agrado para el Pai Bara, un santo cuyo día fue el 13 de junio”, indicó el pai Matías Luna de Oxala, miembro de la religión Afroumbandista.

E indicó que “este es el primero de todos los santos dentro de la línea de orixás umbandas. Es el encargado de abrir los caminos, es el encargado del trabajo, el encargado de que nunca falte el pan sobre la mesa. Si nosotros queremos pedir o agradar a otro orixá tenemos que agradarle primero a él, para que nos abra el camino para llegar a los otros santos”.

A la vez, detalló que “esa ofrenda a simple vista, es una ofrenda en agrado. Uno puede agradar a un santo o a una entidad dentro de la línea de umbanda para agradecer como para pedir, como se hace en cualquier religión. Eso es en agradecimiento, por se utilizan todos elementos naturales. Y no es para pedir que a alguien le pase algo negativo, es para agradar a ese santo y agradecer”.

En ese sentido, detalló el significado de cada elemento de esa ofrenda: “Tiene miel, llaves y tiene plata. Esta persona claramente está pidiendo que se endulcen sus caminos, que haya abundancia, prosperidad, que se abran todas las puertas y dinero, para que nunca falte”.

Por otra parte, se refirió también a los lugares más propicios para dejar este tipo de ofrendas. “Los lugares ideales para que uno pueda dejar esas ofrendas es el templo. Aquellos que no tengan templo lo pueden despachar en un lugar verde, bonito. Y en un cruce, una esquina o en la calle en un lugar donde haya mucho movimiento porque también se le pide que haya mucho movimiento”.

Para finalizar, destacó que “hay algo que hay que sacar del imaginario social y es que esta religión es para hacer mal. Todas las religiones uno puede hacer bien o ser mal. Es una religión en la cual no hace falta hacer grandes cosas para hacer algo malo o algo bueno. A veces con el solo hecho de prender una vela blanca se puede lograr algo muy bueno para otra persona o con una misma vela blanca también se puede hacer mal. ¿Hay gente que hace mal? Sí, como en todas las religiones, pero no son la mayoría”.