Dolor, llanto y escenas de violencia se vivieron anoche en la comisaría 1° de Pergamino, cuando se dio a conocer la identidad de los siete presos que fallecieron a raíz de un incendio ocasionado por un hecho que aún no está esclarecido.

Al conocerse la tragedia, familiares de los reclusos fueron hasta la dependencia policial para pedir explicaciones y saber cuál era el estado de salud de sus seres queridos. Hasta entonces, nada se sabía y las autoridades no se habían comunicado con los deudos.

Poco después de las 20.30, un agente de la policía buscaba tranquilizar a familiares y amigos de los presos se habían amontonado frente a la puerta del destacamento. En la calle, y ante la vista de todo el público, el oficial leyó el informe con el listado de personas que no pudieron ser salvadas del accionar de las llamas.