Hay personajes urbanos que se hacen querer, por su simpatía o por sus formas, pero dejan huella en las personas que de alguna u otra manera se relacionan con ellos. Uno de los más conocidos de San Juan era Miguel Marinero (51), que popularmente se lo conocía como 'Mama-mama'. Luego de padecer varios problemas de salud, este miércoles en la tarde falleció.

Hacía más de 20 años que vivía en el Hospital Marcial Quiroga. Primero ingresó allí por úlceras en sus miembros inferiores (era recurrente verlo con sus pantorrillas vendadas), y con algunos achaques de por medio, igual logró mantenerse activo. El cariño que le tomaron en el HMQ fue tal que allí vivía , y se aferró mucho a los trabajadores cuando perdió a su tía, quien era la persona que lo acompañaba a las curaciones.

Este último verano, la salud le jugó una mala pasada y esta vez casi que lo condenó. Un Accidente Cerebro Vascular lo afectó de tal manera que las secuelas fueron múltiples y su deterioro se profundizó día a día.

"Era uno más de nosotros", dijo a este diario la directora del Marcial Quiroga, Inés Garcés, quien por años estuvo al frente del Servicio del Quemado de ese nosocomio y a diario se topaba en los pasillos con Miguel.

Quién era

El "Mama-mama" tenía una discapacidad a causa de que de niño había sufrido meningitis. Además, hace unos años una úlcera venosa complicó su salud. Al apodo se lo pusieron justamente por sus problemas a la hora de intentar comunicarse. 

Era común verlo en diferentes espacios públicos vendiendo estampitas o cuidando autos para ganarse unas monedas. 

Detrás del querido personaje se escondía una triste niñez. Cuando su madre murió lo empezó a criar su abuela. Hay quienes dicen que esa mujer llegaba a prostituirlo.