Lo querían. Era compañero, atento y, principalmente, su tarea de enfermero la cumplía con esmero y pasión. Ese cariño que se supo ganar en su trabajo durante años se vio reflejado en su último adiós.

Juan Tejada (52) era un enfermero de 52 años -vivía en La Bebida y tenía 4 hijos- que falleció el lunes y que era muy querido en el Servicio de Emergencias 107. Tanto, que sus compañeros -muchos de ellos amigos- conmovidos por el desenlace fatal decidieron acompañarlo de una curiosa forma hasta su última morada.

Varias de las ambulancias del 107 fueron parte del cortejo fúnebre -con sus sirenas encendidas- hasta el mismo cementerio de Zonda.