La fiscal Kelly dijo que durante las audiencias del juicio quedó demostrado que entre diciembre de 1996 y septiembre de 1998 D´Amico cobró simultáneamente sueldos en el sindicato municipal y en la mutual, además de una jubilación por invalidez que le habían concedido por haber trabajado en la Municipalidad de la Capital.

Mencionó que había recibos, libros de sueldos y documentación que demostraba que el dirigente era empleado de ambas instituciones y que no sólo cumplía tareas de asesoramiento, como quería demostrar la defensa. Y en el caso de Manchineles que, como empleador, debió comunicar el doble cobro.

Por eso determinó que la calificación legal de los hechos que se le imputan al asesor es la de autor del delito de defraudación en perjuicio de la Administración Pública y a Manchineles le endilgó ser partícipe necesario en la maniobra. "Engañaron a la Anses", dijo la fiscal.