Aunque haya una dosis enorme de alivio por haber regresado a su ciudad de residencia y todos se muestran completamente predispuestos a cumplir los 14 días de aislamiento obligatorio por venir de otro país, entre los 50 "repatriados" que arribaron entre el domingo y ayer a San Juan, hay también testimonios de personas que piden a las autoridades sanitarias reconsiderar la obligatoriedad de hacerlo en un hotel, argumentando cuestiones que van de lo económico a lo sanitario.

José Lores, con su pareja, integró el primer contingente que fue trasladado desde Ezeiza y que llegó antenoche. "Nos fuimos cuando todavía todo era normal a Estados Unidos y luego que se produjo este estallido, pudimos regresar recién el sábado a Argentina, después de haber estado varados en Chile, sin poder salir del aeropuerto y sin ninguna contención", comenzó su relato Lores.

El hombre de 67 años de edad indicó que en Ezeiza volvieron a estar agrupados en un mismo ambiente cientos de personas que provenían de distintos puntos del mundo y que recién en la madrugada del domingo pudieron partir en colectivo personas de San Juan, San Luis y Mendoza. "Una unidad cómoda pero no había ni agua en el colectivo. Viajamos sin problemas hasta Justo Daract, donde nos paró la Policía de San Luis, que nos hizo bajar para firmar una declaración jurada, es decir que rompieron el aislamiento y nos tuvieron ahí tres horas, con el baño del colectivo colapsado. Después, gente que se bajaba en San Luis, se fue caminando", indicó José, quien agregó que todo cambió a partir de El Encón: "El operativo de identificación duró muy poco, nadie se mezcló con nosotros y fuimos hasta la Terminal de Ómnibus, donde nos tomaron la temperatura y nos indicaron que debíamos hacer la cuarentena en hotel".

De los hoteles designados por el gobierno provincial Lores y su pareja fueron derivados al Cívico (también hay hospedados en Del Bono Suites y está en espera Albertina), quien luego de pasar la primera de las 14 noches previstas, detalló que reciben el desayuno en la puerta de la habitación, al igual que un kit de limpieza para que ellos mismos realicen las tareas de higiene de la habitación. Los aislados deben afrontar los gastos del hospedaje y también solicitar por delivery el almuerzo, merienda y cena.

Este último aspecto es el que llevó a María Da Silva a pedir una reconsideración, porque aseguró que no podrá afrontar los gastos. "Soy brasileña pero hace treinta años que vivo en San Juan. Estuve ahorrando todo el año pasado para poder ir a Brasil y viajé el 5 de marzo, cuando no se había declarado la pandemia, ni se sospechaba que esto llegaría a ser así. Yo estoy totalmente de acuerdo con realizar el aislamiento preventivo, pero me obligan a estar en un hotel que debo pagar 2.900 pesos por noche y además llamar a delivery para comer. En dos semanas, estimo que serán unos sesenta mil pesos, un gasto que no puedo afrontar", sostuvo la mujer de 53 años.

Un problema inicial era pagar, ya que no puede usarse el posnet.

"Creo que pueden estudiar cada caso. Conmigo vive una sola hija y habíamos previsto que yo iba a pasar la cuarentena en el domicilio mientras ella se iba a trasladar a la casa de su novio en esas dos semanas", agregó.

Entre las familias aisladas, Julio Giménez Prado afirmó que intentará que al menos su esposa y su hija de un año realicen el aislamiento en el domicilio, principalmente por el cuidado de salud de la niña. La familia viajó de vacaciones a Punta Cana, "justo antes que se declararan todas estas medidas", indicó el hombre de 33 años. Luego de sortear las peripecias de regreso, se enteraron de la obligación de realizar el aislamiento preventivo en el hotel y asumir los costos, según una disposición provincial que surgiera luego de corroborar como numerosos casos no respetaban la cuarentena, como el empresario Andrés Icazati González.

"Además que no nos informaron de los costos, me dejan en la puerta un desayuno con tostadas y medialunas. Yo no sé cuáles son las condiciones sanitarias. Además, no puedo preparar alimentos para mi hija de un año y no podría estar alimentandola dos semanas con delivery. Pedimos que mi esposa y mi hija al menos realicen la cuarentena en nuestra casa", reclamó.

Varados

94

Son los sanjuaninos que ayer estaban en el aeropuerto de Santiago de Chile, aguardando que un avión los traslade a Mendoza o a Buenos Aires para luego llegar a San Juan.

Protagonistas

JULIO GIMÉNEZ PRADO

Viajó a Santo Domingo

"Nuestro ánimo es cumplir completamente la cuarentena, pero además que no podemos afrontar los gastos pedimos una solución pensando que lo mejor es que mi hija pase la cuarentena en su casa, con la madre".

MARÍA DA SILVA

Viajó a Brasil

"No puedo afrontar los gastos de 2.900 pesos por día de hospedaje y además, la comida. Son hoteles carísimos los que eligieron. Está muy bien la cuarentena pero por qué hacerla en hoteles tan caros".

JOSÉ LORES

Viajó a Estados Unidos

"Hay detalles que deben solucionarse, como por ejemplo que no se puede pagar por internet unos medicamentos que necesito. Pero deseo resaltar la predisposición que hay en el personal del hotel".