"La población se acrecienta en Santiago de una manera sorprendente. Los edificios se multiplican, La ciudad se extiende, y desbordándose de los antiguos limites trazados por Cañada Sur y el Mapocho al Norte, la población se prolonga y ensancha por Las Chimbas y los arrabales del lado opuesto de la alameda. Una calle también nueva y muy recta va de la nueva villa a unirse con la de la Catedral de Santiago estableciendo para lo sucesivo, si hubiese buenas veredas, el paseo más largo y más agradable que pueda imaginarse".