A pesar de estar penada por ley, la caza y la pesca ilegal siguen siendo una constante en San Juan. Incluso el periodo de cuarentena ayudó a que esta actividad delictiva creciera. En 2020 se labró un 25,8 por ciento más de actas de infracción que en 2019.

La información fue brindada a DIARIO DE CUYO por el director de Conservación y Áreas Protegidas, Dardo Recabarren, quien ofreció un panorama detallado sobre la caza en la provincia.

El funcionario indicó que, durante todo 2019 a través de los controles labraron en San Juan 236 actas por la infracción de las leyes 606L y 941R, que protegen la flora, la fauna y los peces en la provincia. Mientras que, en 2020, en plena pandemia, las actas alcanzaron las 297.

“El crecimiento en la cantidad de actas comenzó en abril y el pico se dio en junio. Creemos que por un lado la gente salió más a cazar debido a que la mayoría de las actividades estaban frenadas. Y por otro, era más fácil detectar a los infractores debido a que había poco movimiento en las rutas y los caminos alternativos de ingreso a la provincia, que nosotros estábamos ayudando a controlar”, indicó Recabarren.

Y agregó que, “en general, en San Juan la actividad de la caza crece entre los meses de marzo y octubre y baja entre noviembre y febrero. Esto se da por diversos factores. Por un lado, el calor, que hace que muchas personas no salgan tanto al campo. Por otro, la actividad de la cosecha y la producción, que crece en esa época y mantiene a la gente más ocupada. Y por otro, que muchos salen de vacaciones”.

En cuanto al ranking de departamentos en los que más se realiza está actividad ilegal (teniendo en cuenta las infracciones detectadas en 2020), el que ocupa el primer lugar es Caucete, seguido muy de cerca por Sarmiento y en tercer lugar queda Albardón. Completan el top 5 25 de Mayo y Valle Fértil.

Los animales más buscados

En la lista de caza en San Juan, las aves ocupan un lugar especial, esto por la venta ilegal. Y en este grupo la especie más captura es por lejos el benteveo. En 2020 se rescató 188 aves de este tipo que habían sido cazadas. Mientras que, en segundo lugar quedaron las diucas, de las cuales fueron rescatadas 64.

Al respecto, Recabarren indicó que, “afortunadamente en San Juan no se ha detectado tráfico de fauna cazada hacia otras provincias. Sin embargo, sí hay un mercado negro interno de venta de aves y en estos casos el benteveo es la especie más buscada y la que tiene mayor precio”.

En cuanto al resto de los animales, el funcionario dijo que la mayoría de los animales que son víctimas de la caza son los guanacos, los suris (una especie de avestruz andino), las vizcachas y las liebres o maras.

“En estos casos, se trata de caza por diversión y familiar, la gente consume la carne. Ya no hay casos de venta de cuero o carne y esto ayuda a que baje la actividad”, destacó Recabarren.

Las armas más comunes

Obviamente, los cazadores usan diversos tipos de armas para cazar dependiendo de su presa. Durante los controles que realizan los inspectores de Ambiente, además de rescatar aves y secuestrar los animales muertos, el personal secuestra las armas y elementos de captura.

En 2020, fueron intervenidas en total 21 armas, entre ellas había 8 boleadoras, 7 carabinas, 3 escopetas, 2 rifles y 1 fusil.

Los controles

Los guardaparques e inspectores de la Dirección de Conservación y Áreas Protegidas realizan controles todos los días del año. En total hay 86 personas desempeñando esa tarea.

Algunos de ellos trabajan en la custodia y el cuidado de las 11 Áreas Protegidas que hay en la provincia y el resto desarrolla la tarea en los operativos móviles, que van recorriendo distintas rutas y caminos de modo aleatorio.

Las denuncias antes casos de caza ilegal pueden realizarse de forma anónima al 0800-333-3969 o 4305057.

“Hay que destacar la importancia que tiene para la provincia y su ambiente que se termine con este tipo de actividades. Y que la gente sepa que se realiza controles, que hay intervenciones y que la Justicia actúa de inmediato”, reflexionó Recabarren.

Y rescató que, “todas las aves y animales que son rescatados son enviados al Parque Faunístico –en Rivadavia- donde son asistidos y, en los casos que es posible, devueltos a su hábitat natural”.