Mientras la pandemia por coronavirus avanza y ya se declaró la circulación viral en San Juan, el comercio de la provincia funciona en su totalidad. En ese contexto, en el sector ya se confirmaron más de 20 casos de empleados que se contagiaron la enfermedad, según aseguraron desde el Sindicato que los nuclea, desde donde ofrecieron una radiografía del impacto del Covid-19 entre los trabajadores.

“Los datos que manejamos son los datos oficiales que nos van comunicando las empresas, una vez que confirman casos a través de hisopados”, indicó para empezar la titular del Sindicato de Empleados de Comercio, Mirna Moral.

Y detalló que “en concreto, confirmados por PCR tenemos 22 casos positivos en el sector del comercio y cabe recordar que un empleado joven, de sólo 39 años que trabajaba en Falabella falleció”.

En cuanto a los locales afectados, indicó que, “hemos registrados casos en los comercios El Libertador, el supermercado Walmart, en el Átomo de Rivadavia, entre cuatro sucursales de Vea, en La Tijera, en Las Tres B, en El Chileno (un comercio que se encuentra en Chimbas) y en la distribuidora Entre Ríos”.

Sobre estos casos, comentó que “una vez que se detectan se pide la desinfección inmediata del lugar y los propietarios tienen que presentar en el Sindicato video y comprobante de esa tarea para que confirmemos que realmente se realizó”.

A la vez, dijo que “además se procede a aislar a todo el personal que trabaja con la persona contagiada y son contacto estrecho. En la mayoría de los casos se los aisla en su casa por 14 días y se los considera caso confirmado, pero sin haber sido hisopados ni pasar a formar parte de la estadística oficial”.

Moral se refirió también a las tareas en las que los empleados están más expuestos al contagio, teniendo en cuenta los casos detectados hasta el momento. “En el caso de los supermercados sin dudas los cajeros son los más propensos a enfermarse. Y en los comercios, los vendedores son los más contagiados”, indicó.

Para terminar, aseguró que “en el sector hay mucho temor, la gente está preocupada. Nosotros lo que hacemos es controlar permanentemente que se cumplan todos los protocolos. Y ahora estamos pidiendo, específicamente, la renovación de todas las máscaras de protección, porque después de 7 meses de uso tienen mucho desgaste y ellas y los tapaboca siguen siendo la principal arma para contra la enfermedad para los empleados”.