En el marco de los pedidos de prisión domiciliaria por la emergencia sanitaria por el Covid-19, los condenados por delitos de lesa humanidad también se sumaron a la movida. Dentro de esos reclamos se encontraron los de la cúpula represiva que actuó en la provincia durante la última dictadura: Jorge Olivera, Gustavo De Marchi, Francisco Del Torchio y Eduardo Cardozo. Las solicitudes de los cuatro fueron rechazadas por el Tribunal Oral Federal, ya que si bien son parte del grupo de riesgo (por la edad), no cuentan con ninguna enfermedad grave que los inmunodeprima y los haga propensos a contraer el coronavirus en la cárcel, indicaron fuentes judiciales. Además, agregaron que tanto Olivera como De Marchi se encuentran en el complejo hospitalario del Penal de Ezeiza, en el que están bien contenidos dado que tiene capacidad para 21 internos y sólo hay nueve. Por lo tanto, ambos tienen las correctas condiciones de aislamiento para evitar contagiarse.

Olivera fue el jefe de Inteligencia en la provincia, Cardozo estuvo al frente del Penal de Chimbas en la dictadura, mientras que De Marchi y Del Torchio se desempeñaron como oficiales en los grupos de tareas.

Olivera, De Marchi y Del Torchio fueron condenados en el primer y segundo megajuicio por delitos de lesa humanidad, mientras que Cardozo fue castigado en el último proceso. A otro acusado al que le negaron la domiciliaria fue el exmilitar Marcelo López.