Una joven mamá y sus padres fueron detenidos en el marco de una investigación por la supuesta venta de una beba recién nacida de 25 de Mayo. En el escándalo también está involucrado un médico del Hospital de Media Agua, que hasta anoche estaba prófugo y era señalado como la persona que hizo de nexo para entregar a la criatura a un matrimonio de Buenos Aires. Se habla de que pagaron 200 pesos a la madre de la nena y le hicieron firmar un papel, cuyo contenido desconocían. La pareja que se llevó a la beba, ayer la entregó a la Justicia y negó que hubiese un negocio.

La única inocente en todo esto es esa nena de 2,750 kilos que nació el mediodía del 3 de este mes en el Hospital Ventura Lloveras de la ciudad de Media Agua, Sarmiento, revelaron fuentes del caso. Elva Nilda Videla (19) había llegado ahí un rato antes, acompañada por un pariente de apellido Morales, y fue atendida durante el parto por el médico de guardia, Roberto Poggi, indicaron fuentes de la investigación. La chica es del paraje Punta del Agua, al Sureste de Las Casuarinas, en 25 de Mayo.

Era un nacimiento más. Lo extraño fue que la criatura desapareció de los brazos de su madre al día siguiente, después de que les dieron el alta. Y esto salió a la luz por Agustín Córdoba, el supuesto padre de la nena, quien en reiteradas oportunidades intentó ver a su hija y sólo encontró evasivas por parte de la familia de su novia, según versiones. El joven luego se enteró que la nena había sido entregada o vendida a una pareja, fue por esto que el 9 de marzo denunció el caso en la Seccional 32da. de Las Casuarinas y tomó intervención la juez María Inés Rosselot, del Quinto Juzgado de Instrucción.

El caso comenzó a aclararse cuando supuestamente la mamá y los abuelos de la nena reconocieron que la habían entregado a otra familia. Los investigadores policiales de la Seccional 32da., establecieron que Inés Molina y Damacio Onofre Videla no querían a esa beba de su hija Elva y la convencieron para deshacerse de la criatura. Para esto, supuestamente hablaron con el médico Roberto Poggi el mismo 3 de marzo y le hicieron saber su intención de entregar a la nena a otra familia. En sus declaraciones, afirmaron que Poggi hizo unos llamados y les dijo supuestamente que tenía una pareja interesada y se encargaría de todo, revelaron en la policía. También relataron que, cuando Elva y su beba fueron dadas de alta, en la puerta del hospital los estaban esperando una pareja en un auto negro. Los Videla declararon en la policía que esas personas le entregaron 200 pesos y les hicieron firmar unos papeles que no saben qué decían, y se llevaron a la recién nacida, afirmaron fuentes del caso.

Poggi también declaró en la policía y afirmó que atendió a Elva Videla, pero negó que haya intervenido en la entrega de algún recién nacido. En el hospital existen registros de que la beba nació en ese lugar, pero extrañamente desaparecieron las certificaciones numeradas de otros nacimientos. Se especula que en unos de esos papeles pueden haber hecho figurar otro nacimiento, para hacer pasar a la hija de Videla con otro nombre.

A medida que avanzó la investigación de la juez Rosselot, Poggi quedó más comprometido y entonces ordenaron su detención. El fin de semana allanaron su casa en calle Laprida, en el centro capitalino, pero no lo encontraron, dijeron en la policía. Hasta anoche, seguía prófugo, confirmaron en el juzgado. Los que sí aparecieron fueron la mujer y el hombre que se llevaron a la criatura a Buenos Aires. Según fuentes judiciales, la pareja se presentó ayer al Quinto Juzgado de Instrucción y entregó a la beba. No los detuvieron en razón de que argumentaron que actuaron de buena fe y creyeron que todo era legal. Mientras sigue la investigación, la nena fue puesta al cuidado de un matrimonio en un Hogar de Belén.