El 18 de enero pasado San Juan sumó un nuevo capítulo en la historia de los terremotos. Un sismo de 6,4 grados en la escala de Richter movió toda la provincia y causó grandes daños, principalmente en Sarmiento, Pocito y Rivadavia. En este contexto el Gobierno provincial comenzó con distintas estrategias para brindar soluciones habitacionales a las personas más afectadas. Es que tras el temblor, 2.025 familias quedaron sin techo o con su casa muy dañada. Poco más de 6 meses después de aquel día, ya no hay familias sin techo por el terremoto. Adolfo Vázquez, secretario de Servicios Públicos, comentó que las familias que se vieron más afectadas ya recibieron módulos de emergencia, casas prefabricadas o materiales de construcción. "La mayoría de esta ayuda es paliativa. Muchas familias en un futuro recibirán una casa en alguno de los barrios que se están construyendo, pero hoy en día podemos decir que ninguna familia se quedó sin un techo luego el terremoto" dijo.

Pocito, sin dudas, fue una de las zonas más afectadas por el terremoto, por la cercanía que tuvo con el epicentro. Es por esto que en este departamento se concentró gran parte de la ayuda oficial. Vázquez contó que en esta zona entregaron la mayoría de los módulos habitacionales de emergencia y 22 de las 25 casas que donó el gobierno de Misiones. "Tras el terremoto se entregaron 200 módulos habitacionales de emergencia y la mayoría fueron para vecinos de Pocito. También hubo gente de Chimbas y 25 de Mayo" dijo Vázquez y comentó que en el resto de los departamentos, la mayoría de las personas recibió materiales de construcción. El funcionario comentó que entregaron 1.800 kits de materiales y que casi todos fueron para vecinos de asentamientos de Rivadavia, que es donde hubo muchas roturas de casas, pero no derrumbes importantes, como en otras comunas de San Juan.

Sobre los módulos y las casas, Vázquez dijo que es lo que más demoró en concretarse. De hecho comentó que las últimas fueron terminadas hace unas semanas, en 25 de Mayo y en Chimbas, porque desde esos departamentos hubo una demora municipal en la construcción de las plateas sobre las que se instalan estas viviendas prefabricadas. "Llevamos muchos meses trabajando sin parar. Trabajamos mucho pensando en que llegaban los días más fríos y queríamos que todas las familias tuvieran un lugar para vivir tranquilos. Estos módulos fueron muy bien recibidos por las familias afectadas, porque muchos habían quedado en la calle. Hoy, cuando uno recorre las zonas más afectadas por el terremoto, vemos cómo algunas personas ya han construido galerías, baños y habitaciones para ampliar estas soluciones habitacionales, y para estar más cómodos" agregó el funcionario y dijo que la idea es que una vez que las personas reciban sus casas definitivas en los distintos barrios, que no serán para todos los afectados por el terremoto, ellos esperan recuperar al menos el 60% de estos módulos para que la Provincias los guarde, para hacerle frente a alguna otra emergencia.

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Desolación. Los días posteriores al terremoto, las postales de las zonas afectadas eran desoladoras. Soluciones. Con el paso de las semanas, las postales cambiaron. El escombro desapareció y poco a poco instalaron módulos y casas.
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