"Hay situaciones en las que no se respeta a los niños como personas. Por ejemplo, a veces se protege más al abusador que al niño víctima de abuso. Si tenemos en cuenta lo que dice la Ley de Niños, Niñas y Adolescentes, que establece que el chico sólo en situaciones excepcionales puede ser separado temporariamente de su familia, cuando se trata de una familia violenta o que abusa de un menor, no lo podemos dejar a ese niño con esa familia, con esto estamos atentando contra la protección real de los chicos. Si el chico comienza a exteriorizar que está siendo maltratado o abusado, y a ese niño se le dice que no diga nada hasta que llegue a la cámara gessel, mientras tanto ¿quién protege a esa criatura?

Considero que el Estado debe ser el tutor de los derechos del niño porque incluye instituciones como el Defensor del Menor, los jueces de menores, etcétera, que son las instancias que tiene nuestra organización social que están por encima de la familia y que debieran custodiar y proteger al niño. También se debe revisar la Ley de Niños: hay situaciones en las que no se midieron ciertas variables y tiene una serie de falencias que están descuidando la protección de los menores.

Los chicos víctimas de violencia o abuso, cuando sienten que hubo un juez de menores o un asesor de menores que estuvo protegiendo sus derechos, sienten también que se avanza en su recuperación. Pero sólo sucede cuando ven que hay una instancia superior, prevista en nuestra organización social, que lo va a proteger".