-Esta no es su primera visita a la Fiesta Nacional del Sol, ¿qué valoración hace, entre lo que vio el año pasado y este año?

-A nivel general, la Fiesta Nacional del Sol fue una de las fiestas que más creció dentro del país. Sobre todo en calidad, que es muy importante. Yo vine el año pasado y hablé con muchas personas de otras provincias que venían a la fiesta por primera vez y todos coincidieron en algo: el asombro que les causó todo el trabajo que se tomaron para hacer una fiesta de tanta calidad artística.

-En lo personal, ¿cuál fue el rasgo que más le impresionó?

-El uso de la tecnología, de la mano de lo artístico y lo creativo, me impactó, porque lo usaron muy bien.

-¿Qué cosas cambiaría?

-Creo que si bien se ha hecho promoción, a esta Fiesta del Sol hay que imponerla en el público argentino e incluso aprovechar los vecinos que nos visitan, sobre todo de Chile. Por eso, hay que seguir con la difusión en el país y afuera también.

-¿La compararía con la Fiesta de la Vendimia?

-Creo que son dos cosas distintas. La de ustedes es una fiesta con una fuerte personalidad, que quiere mostrar el progreso que han alcanzado de la mano de su trabajo, y eso se ve claramente. Yo no voy a muchas fiestas, pero creo que aquí se ha logrado darle un perfil de celebración del Sol como elemento fundamental para el trabajo de la tierra y el crecimiento de la producción y hay que seguir profundizando en eso. Y así hay que promocionarla.