"Considero positivos los resultados de la encuesta que se realizó durante el V Congreso Mundial por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia. Al tener acceso a ese informe, de esa manera vemos que los chicos reconocen que sus derechos son vulnerados. Esto significa, en consecuencia, que pueden opinar con respecto a ello, y eso mismo es una manera de revertir las situaciones de violencia y vulnerabilidad de las que son víctimas. Esto indica con claridad que, a diferencia de lo que sucedía en años anteriores, hoy los niños reconocen sus derechos y su opinión sí es tenida en cuenta.

Los niños en general son vistos como personas débiles en la sociedad. Es por eso que son víctimas de abusos y violencia por parte de los adultos, como los múltiples casos que conocemos y a los que acudimos para auxiliar y contener. De todas maneras, son situaciones que ahora pueden visualizarse, porque muchas veces los mismos niños se animan a denunciarlo. Precisamente eso también es algo que antes no ocurría. En ese sentido, considero que en San Juan se ha avanzado mucho con las políticas de protección y promoción de los derechos de los niños, destinadas a contener y proteger a las víctimas de los ataques. En cuanto al rol de los adultos como padres, debe ser el de asegurar el bienestar y la seguridad de sus hijos. Como sociedad, todos debemos respetar sus espacios. Y como Estado, tenemos que garantizar que se cumplan sus derechos. Lo más importante es escucharlos, respetarlos y no subestimar a los niños".