"807'' de Alejandra Araya  

(Foto: Colaboración Alejandra Araya )

 

 Un número clave 
 
 
Quizá para muchos, el click para tomar conciencia de la importancia de donar un órgano recién se produce cuando está en riesgo la vida de un ser querido. Si ese ser es joven, con una vida por delante, y la historia está narrada en un libro, el camino se allana y la toma de conciencia llega sin necesidad de sufrirlo en carne propia o porque los medios invaden con una catarata de anuncios para fechas oportunas. Esa es la idea que encierra el nuevo libro presentado por la escritora Alejandra Araya. 


Gonzalo Hugo Furlotti es el protagonista de esta historia que entreteje otros conflictos relacionados con el trasplante e involucra a su familia, los amigos y a su novia. "Con dinero se puede pagar una buena obra social, pero no se puede comprar la salud", piensa Gonzalo mientras se dializa a la espera de un riñón.  


El libro editado por Comunicarte consta de 168 páginas, y es el sexto luego de Examen final, Camino de regreso, Miradas, El mágico libro de Zaha y Los muchachos de la pizzería. 


En esta oportunidad, la presentación de la obra se hizo el 23 de Mayo, precisamente en el mes de la Donación de Organos. 


"Nos pareció un lindo motivo para concientizar además de presentarlo. Por ello en la presentación nos acompañó Inaisa -Incucai San Juan-. Sin donación, no hay trasplante. Por lo que toda acción que permita crear un espacio de reflexión, es bienvenida+, afirmó Alejandra.  


La historia de Gonzalo, cuyos riñones colapsaron a los dos años por la bacteria escherichia coli, está ambientada en San Juan, aunque gran parte de la trama se desarrolla en Buenos Aires donde el joven recibe asistencia. 


Sin duda que esta es la obra más autobiográfica de Alejandra Araya, ya que está inspirada en las vivencias de su pareja, Jaime Bergé. está abordada desde las dificultades que se deben transitar hasta lograr el trasplante y, finalmente, la esperanza de vivir mucho mejor. 


Claro está que la pregunta clave es acerca del significado de Ochocientos siete, pero es precisamente lo que no se puede develar. "El número es simbólico, es un ritual de paso, la clave de la novela, por eso no puedo anticipar nada más", dice Alejandra. 


807 forma parte de la colección "20 escalones, de la Editorial Comunicarte, y por su contenido está muy orientada a adolescentes, aunque está escrita para todo público. 


"La obra no fue escrita para un lector determinado. Su lenguaje, el conflicto y la ética con la que se plantea el tema lo hacen material de lectura para cualquier edad, lo que sucede es que los adolescentes pueden llegar a tener más empatía con el protagonista por una cuestión de edad", aclara Alejandra. 


La escritora 


Alejandra Araya es profesora en Letras. Tiene seis libros publicados: Camino de 
regreso, Examen Final, Miradas, Los muchachos de la pizzería, 807 y El mágico libro de Zaha. 
Dicta cursos y talleres de lectura. Narradora, guionista, columnista en medios gráficos y radiales, obtuvo numerosos premios y reconocimientos por su labor literaria y pedagógica.  

 
"Trazos'' de Elio Azerrad 

(Foto: Federico Levato )

 
Páginas para darse todos los gustos 
 
  
Este es su primer libro, aunque en su haber y en sus cajones o vaya a saber dónde, hay cientos de borradores (de poesías y cuentos que esperan ser releídos desde sus años adolescentes, cuando su cabeza y sus ganas de plasmar lo que le pasaba, lo llevaban a escribir "visceralmente'' sobre un papel).  


También hay de su puño y letra, mucho texto escrito para presentar, difundir, agasajar y por qué no ganar clientes, afianzar electores y hasta generar benefactores para instituciones varias. 


Es que Elio Azerrad es, sin lugar a dudas, un hombre de letras. Aunque pueda parecer obvio, para él, las palabras son siempre fundantes: de su cotidianeidad pero también parte de sus momentos de placer. Vale aclarar que lo de cotidianeidad se refiere a que es psicoanalista de profesión y por opción, gusto y pasión a tiempo completo, desde hace más de dos décadas es asesor en materia de comunicación y estrategias para actores tanto en la gestión pública como la privada. Por ende, la palabra siempre lo acompaña. 


"Yo había demorado en el tema literario porque sentía que lo que escribía aún no estaba maduro para ser mostrado. Ahora, con mucho trabajo de relectura, tachadura, corrección y diseño, pero también llegando a un punto en la vida que en el que uno tiene más tiempo para la reflexión, el análisis, la mirada desde otras perspectivas y la búsqueda para complacerse y darse los gustos, es que me animé'', dice quien, en un juego de palabras, no se considera escritor todavía, sino un simple "escribiente por eso esbozo trazos''. 


Justamente "Trazos'' es el nombre con el que reúne cuentos, poesías, fragmentos e inclusive microrrelatos que hoy, después de años y años, considera que merecen ser contadas. Son historias de gente común, que él mismo vivió o que observó de lejos, o que imaginó aunque, aclara, no es literatura fantástica. No tienen entre sí un hilo conductor ni un tema explícito. Ya que él le escribe a los afectos como a las miserias humanas, la realidad, el Medioevo, la siesta, al hombre hebreo, a un amigo y a la mujer con una carga de romanticismo, entre otras inspiraciones.  


Éste, su primer trabajo literario es un esfuerzo propio y es el puntapié inicial para un camino sin retorno. Con "Trazos'' no solo nació su fan page en Facebook (se encuentra como Elio Azerrad De Punio y Letra) sino además su proyecto "De Punio y Letra'' (así lo patentó) para crear un polo cultural que concentre a otros productos editoriales vinculados no solo al papel y la tinta. Mientras tanto, está concentrado en la presentación del libro que será la próxima semana y que planea compartir con quienes quiere y con todo aquel que está interesado en indagar en sus escritos. El libro ya se consigue en la librería Piedra Libre. 


  
  
Presentación en sociedad 


Elio no quiere "aguar la fiesta'', su fiesta, adelantando detalles de lo que sucederá la noche del viernes 9 en el Club Sirio Libanés, pero por lo apenas deja entrever se presume que será una presentación de un libro muy poco tradicional y hasta con atisbos de transgresión. Un momento repleto de sus gustos y para darle el gusto a sus afectos. Con música en vivo pero también la que lo acompañó en su camino hasta el día de hoy, con imágenes fundamentales y por supuesto, infaltables palabras en vivo y grabadas de parte de parientes, familiares e inclusive personalidades que ha conocido y querido en su devenir profesional. Todos estos elementos estarán presentes en ese evento al que ha calificado como su primer evento para sí mismo. Es que ha llegado a la conclusión que "a los 53 años ya es hora de darse los gustos''.