Cobalto - Nueva fuente energética

 

 

El cobalto (del alemán kobalt, voz derivada de kobolds, los "gnomos" que, según los mineros de Sajonia de la Edad Media, eran espíritus de la tierra que tenían embrujado el mineral), es un metal ferromagnético, de color blanco azulado. Durante la última década, este metal había pasado inadvertido hasta que el año pasado despertó el interés del mundo financiero a partir de su capacidad de mejorar el rendimiento de los automóviles eléctricos. La razón es que el cobalto tiene la cualidad de potenciar las propiedades de otros metales como el litio, que se ha vuelto el componente más usado en las baterías.

 

 

Silicio - Un semiconductor

 

 

Es el segundo elemento más abundante en la corteza terrestre (25,7 % en peso) y el segundo después del oxígeno. Se presenta en forma amorfa y cristalizada. El silicio es un semiconductor; su resistividad a la corriente eléctrica a temperatura ambiente varía entre la de los metales y la de los aislantes. La conductividad del silicio se puede controlar añadiendo pequeñas cantidades de impurezas llamadas dopantes. La capacidad de controlar las propiedades eléctricas del silicio han posibilitado el desarrollo y aplicación de los transistores y circuitos integrados que se utilizan en la industria electrónica.

 

 

Manganeso - Uso en aleaciones

 

 

El manganeso es un metal reactivo, de color gris plateado, con un tinte rosáceo. Su uso principal está en la fabricación de aleaciones de acero. Los aceros pueden tener un alto porcentaje de manganeso (70 a 80% de manganeso, 20 a 30% de hierro). Estos materiales se denominan ferromanganesos. El químico sueco Scheele fue el primero en describir que el manganeso era un elemento, pero fue Johan Gottlieb Gahn quien lo aisló por reducción del dióxido con carbono en 1774, unos años después de los experimentos realizados en Viena por Ignatius Kaim (1770), quien había realizado las primeras aproximaciones.