El coronavirus ha movilizado todas las actividades, entre ellas la moda, que siempre está trabajando de manera adelantada. Muchos diseñadores argentinos se inspiran en las tendencias que marcan los gigantes europeos, pero debido a la pandemia por el Covid-19, la situación es distinta.

No se presentaron colecciones, no hubo desfiles ni grandes semanas de la moda y si bien en Europa ya están trabajando con las nuevas tendencias para el verano, en Argentina la preocupación es superar este crudo invierno que ha llevado a los diseñadores a tener sus ateliers y locales con las puertas cerradas desde marzo.

Hace un tiempo atrás, la Cámara Argentina de la Moda declaró la “emergencia en la moda”, por la situación económica de sus integrantes. Muchos de ellos se han reinventado con la venta online y con presentaciones de las temporadas otoño –invierno 2020 vía streaming, otros optaron por guardar sus colecciones y comenzar a trabajar en la próxima temporada, pero sin rumbo seguro.

Fabián Zitta, diseñador porteño, por ejemplo, está trabajando en una línea de novias para el próximo verano. Por su parte Pía Carregal está enfocada en la nueva colección de verano, con la incertidumbre si la podrán presentar de manera tradicional o bajo la virtualidad.

El problema de las grandes marcas es que producen colecciones enteras bajo una tendencia. Los diseñadores no lo hacen ya que son creadores, precursores y no seguidores, aunque si se inspiran en las colecciones de los grades.

Al parecer habrá que esperar un poco más para ver las nuevas tendencias argentinas para la temporada primavera – verano que se viene.