Qué el sol sanjuanino es único ya se sabe, y es tan cierto como que hay que cuidarse de él para evitar que sus fuertes rayos UV dañen la piel y el pelo. Si a sus efectos nocivos le sumamos el cloro del agua o el agua salada si es el mar, el daño puede ser tremendo. Para evitar el deterioro del cabello la única solución es cuidarlo como corresponde e indican los especialistas. Franco Licata, estilista local, explica que "estos factores alteran la suavidad de la cutícula capilar, la deshidratan y hace que se vuelva poroso, seco y más quebradizo en los largos. A diferencia de la piel , el cabello no se pondrá colorado y doloroso cuando esté sobreexpuesto al sol, por lo que es más difícil medir el daño de los rayos UV".

Es frecuente empezar a ver cabelleras afectadas por los rayos UV en esta época, que se delatan por la falta fuerza y la elasticidad. Ante estos síntomas se deben tomar medidas urgentes y evitar males mayores. 

"La fotooxidación desencadena la decoloración en el cabello natural y el cabello teñido: el sol junto al aire oxidan la melanina de nuestro cabello haciendo que este cambie de coloración dejándolo más expuesto. Las personas con el cabello rubio, canas o tintes se les volverá más frágil y quebradizo. Para protegernos la piel del cuero cabelludo es fundamentar elegir productos que en sus primeros ingredientes contengan protección para los rayos UVA Y UVB como el Benzophenone-2", agrega Franco.

Cuidar el cuero cabelludo del sol es fundamental para que no se lesione ni se queme como la piel del resto del cuerpo, independientemente de la densidad o no del pelo.

"La piel se deshidrata más y pueden aparecer irritaciones e incluso dermatitis, enrojecimiento, manchas solares, ampollas, entonces es mejor prevenir que curar", indica el estilista.

Para evitar daños aquí se detallan los tips aconsejados por Licata:

• Cubrirse con sombrero opaco preferentemente que no tenga agujeros para evitar que se filtren o también un pañuelo de seda.
• Colocar productos antes y replicar siempre después de salir del agua no olvidando de respetar las piletas ajenas.
• Antes de entrar al agua, colocar crema o gel con protección UV: evitarás que se deshidrate a la vez que protege.
• En caso de agua clorada o salada conviene mojar el cabello con agua dulce: el cabello al estar lleno de agua no absorberá demasiada agua clorada o salada que si estuviera seco. Al salir del agua reforzar con cremas.
• Es importante no dejar agua clorada o salada porque al secarse el cabello lo irá deshidratando.
• Al retorno de vacaciones las mascaras de reconstrucción son ideales.
• El aloe Vera es un gran aliado acompañado de productos con filtro uv.
• El mejor consejo es disfrutar sin descuidar la piel del cabello pero también ser amable con uno mismo y entender que las vacaciones son justamente el descanso de la rutina.

Sugerencias para tener en cuenta

• Actualmente se puede elegir entre una gran variedad de protectores para el pelo. Con su uso no sólo se consigue frenar los rayos solares, también hidratan y nutren dejando más brillante la melena.
• Mojar el pelo antes y después de la piscina o mar. Esto ayudará a que éste no entre en contacto directo con la sal o el cloro, disminuyendo así su poder de penetración.
• Lavarse el cabello con agua fría también favorece su cuidado. Son muchos los beneficios que tiene sobre el cuero cabelludo como mejorar la circulación sanguínea, eliminar los residuos y aportar un extra de brillo.
• Evitar el uso de secadores o planchas: Con el calor del verano, lo ideal es dejarlo secar libremente. Así se evita el uso de secadores, que lo que hace es dañar aún más el pelo. Si por diversos motivos o prisas no queda más remedio, utilizarlo a temperatura media y con un protector térmico antes.
• Optar por recogidos, en lugar de peinados con raya ya que ésta sólo sirve para potenciar que el cuero cabelludo se queme, ya que los rayos tienden a incidir más en esa zona. Para evitar que esto ocurra es mejor peinar el pelo hacia atrás.
• A esto se suma que los recogidos son ideales para el verano porque incrementan la sensación de frescor y confort. Hay muchas opciones, desde moños hasta trenzas, sin dejar de lado, las clásicas coletas.
• Cortar las puntas una vez finalizada la temporada de verano. Aproximadamente 5 centímetros alcanzan para sanear los extremos, fortalecer la fibra capilar y luchar contra la sequedad.