Es en Las Lomitas, Albardón, donde hoy celebran las patronales.
Creen que se desató con el viento y consumió alrededor de 300.000 kilos. Anoche seguían combatiéndolo.
Tenía 38 años, cuatro hijos y era encargado en un pasero en el que trabajó siempre. Creen que hubo una falla humana.