Samsung anunció este lunes que pospone el lanzamiento de su nuevo Galaxy Fold, el smartphone con pantalla plegable de 2.000 dólares, luego de las críticas y los problemas que reportaron los especialistas.

Los periodistas especializados que recibieron antes de su lanzamiento el dispositivo evidenciaron un desprendimiento de la película protectora del dispositivo, la aparición de grietas y, en última instancia, el hecho de que dejó directamente de funcionar.

Según revelaron los analistas especializados en teléfonos celulares, como el youtuber Marques Brownlee, y los periodistas Mark Gurman, de Bloomberg, y Stevee Kovach, de CNBC; la pantalla AMOLED del Samsung Galaxy Fold viene equipada con una fina lámina protectora de material plástico que, si se retira, puede provocar daños en forma de grietas y mal funcionamiento.

A través de su manual de instrucciones, Samsung advierte de que "retirar la capa protectora o utilizar adhesivos en la pantalla principal, como protectores de pantalla o pegatinas, pueden causar daños". No obstante, según reconoce Gurman en su Twitter, la compañía no lo especifica claramente en el manual del producto.

Tras las críticas, el gigante surcoreano lanzó un comunicado oficial en el que dice que "Samsung está trabajando para asegurar que todos sus dispositivos ofrecen la mejor experiencia de cliente y la mejor calidad en el momento de ponerlos a la venta". Dicho comunicado agrega que se ofrecerán más detalles lo antes posible.

La era de las pantallas flexibles

Samsung es una de las compañías líderes que compiten en la carrera por poner en el mercado un teléfono con pantalla plegable, y quiere llegar antes que Huawei y Xiaomi, las empresas chinas que le van en saga.

Los analistas proyectan que el mercado de pantallas flexibles basados en tecnología OLED podría alcanzar un valor de 15.100 millones de dólares para los próximos tres años, según estimaciones realizadas por Markets & Markets. Se presume que en la siguiente generación de flexibles, además de mejorar algunos aspectos, estas pantallas sean adaptadas a televisores, domótica y electrónica de consumo.

La tecnología de pantallas flexibles supone un enorme reto tecnológico para todos los que quieren comercializar estos equipos. Pero como sucede con todas las tecnologías innovadoras, estas siempre tienen el riesgo de estar inmaduras y provocar problemas inesperados. Aunque, ciertamente, es llamativo que estos problemas no hayan sido detectados por la propia empresa antes de trasladar unidades del producto a la prensa.

Por lo pronto, el Galaxy Fold liquidó todas las unidades en la preventa, en apenas un día desde que se habilitó la web para comprarlo, aunque Samsung no aclaró cuántas unidades se vendieron.