Es bien sabido que la hidratación es importante todo el año, pero a medida que las temperaturas aumentan se hace más necesario incorporar agua al organismo para que éste funcione correctamente. Así como los órganos del cuerpo humano la necesitan para no deteriorarse, ni hablar de la necesidad de la piel, el órgano más extenso de todos. Pero la piel, además de líquido, demanda otros cuidados para mantenerse hidratada como cremas, emulsiones y hasta tratamientos si la idea es mantenerla lozana y sin manchas.

La doctora, Verónica Godoy, especializada en Dermatología sugiere "usar una emulsión o crema según el tipo de piel, que sea en base a agua, para mantener la hidratación sin generar oleosidad. En mi experiencia personal siempre tengo en cuenta, para el día, un producto con vitamina C, ya que los beneficios que nos brinda son innumerables, como por ejemplo unificar tono, además es antioxidante, hidrata, refuerza las defensas de la piel y es antiarrugas. Para la noche, me gusta mucho usar ácido hialurónico o algún regenerador. La ventaja del ácido hialurónico es que mejora notablemente la hidratación de la piel porque tiene la cualidad de ser filmógeno es decir retiene agua y eso es lo que la piel necesita en esta época. Además hidrata de manera importante y sin generar alergias, ni irritaciones".

A esto suma que hay que tener cuidado especial en la zona de párpados, ya que es muy delicada. Por ese motivo se deben usar productos adecuados, teniendo en cuenta que muchos de ellos, incluido los protectores solares, generan irritación por la extrema sensibilidad de esta zona.

"La falta del cuidado de la piel en verano después nos sorprende por sus consecuencias a largo plazo como las manchas, envejecimiento, cáncer de piel, entre otras", indica la doctora Godoy.
 

Tratamientos

Para una hidratación más intensa, la especialista también recomienda realizar tratamientos en gabinete, con máscaras, principios activos, y distintos procedimientos que se usan mucho en la actualidad.

* Electroporación: Consiste en la emisión de una corriente de baja intensidad que aumenta la permeabilidad de la piel, abriendo su poro y permitiendo que el principio activo aplicado en superficie penetre hasta la dermis media. Es ambulatoria, indolora, dura 40 minutos aproximadamente y cuesta 500 pesos por sesión.

* Dermapen: es un pequeño aparato, como un lápiz, que mejora la calidad, la textura, el brillo, la luminosidad, genera colágeno y disminuye las arrugas. Es ambulatorio e indoloro, dura cerca de 30 minutos. Cuesta 1500 pesos por sesión y lo ideal es hacer entre 4 a 6 sesiones, según necesidad.

* Skinbooster: Es una inyección de ácido hialurónico, aplicada en las zonas necesarias. Actúa directamente sobre la laxitud e hidratación de la piel. También es una práctica ambulatoria, de aproximadamente 30 minutos de duración. Cuesta 3500 pesos por sesión y lo ideal son 3.

* Además se recomienda alejarse de hábitos tóxicos, estrés, alcohol, tabaco, dormir poco o mal; y por el contrario aliarse a hábitos saludables.

* Tomar mucho líquido, agua o jugos naturales principalmente ricos en vitamina C; o tomar colágeno bebible de muy buena calidad -su mejor combinación es con resveratrol y vitamina C-.

* Evitar los cambios bruscos de temperatura ya que si en invierno la piel sufre y se reseca por el frío, en verano ocurre lo mismo por el calor.

"Con estas pautas simples tendremos una piel hidratada, luminosa y llena de vida, y así el verano será nuestro amigo, y no nos jugara una mala pasada. También hay que tener en cuenta que si alguien nota un cambio en su piel, 

como color, textura, lunares o manchas anormales, no debe dudar en consultar a su dermatólogo de confianza, teniendo en cuenta que cualquier alteración detectada a tiempo es mas fácil que responda exitosamente a los tratamientos", indica Verónica.

Los cuidados del verano

Si hay algo que se debe evitar es que las altas temperaturas jueguen una mala pasada, y si bien la piel debe cuidarse todo el año, en esta temporada se debe poner aún más énfasis. Tanto el cloro de la pileta, como el agua del mar, el aire acondicionado, la exposición al sol, entre otros factores pueden ser dañinos si no se tienen en cuenta estas sugerencias que propone Verónica Godoy, médica dermatóloga.

* Fotoprotección: Usar un protector solar de amplio espectro UVA y UVB (radiaciones ultravioletas A y B). Reaplicarlo cada 3 horas. Los hay con textura y presentación adecuada a cada tipo de piel -spray, crema, emulsión, gel, polvo, bruma-. Mínimo factor 30. 

No descuidar las zonas olvidadas: cuero cabelludo, dorso de nariz, orejas, labios, dorso de manos, empeines, cuello, y escote.

* Usar ropa adecuada: Incorporar a la indumentaria cotidiana, sombrero, anteojos envolventes para sol, ropa liviana y ligera que cubra la mayor parte del cuerpo, se pueden conseguir prendas con protección solar incorporada.

* Limpieza: Limpiar el rostro 2 veces por día, mañana y noche, debido a que en el verano sudamos mas y los poros se pueden tapar generando impurezas en la piel. Hay que elegir el producto adecuado a cada tipo como espumas, lociones, agua micelar, entre otros.

* Exfoliar: Es un paso necesario en esta época del año, lo ideal es una o dos veces por semana, para eliminar células muertas y permitir la regeneración y renovación de la piel

El dato

Verónica Godoy, médica dermatóloga
Clínica Alvear: Matías Zavalla 71 Norte
Teléfono: 4267436

Beber y comer sano

Es muy importante aumentar la ingesta de líquido de dos litros, recomendados en invierno, a tres litros y medio, sobre todo si se realiza actividad física. Estas necesidades de líquido se pueden cubrir no sólo con beber, sino también con una buena alimentación.

La botella de agua debe ser la gran aliada, y es mejor ingerir los líquidos de forma lenta para que el organismo los asimile mejor. Es decir que hay que tomar en forma periódica y no de una sola vez.

En el caso de entusiasmarse con una gaseosa o agua saborizada lo ideal es controlar que no contenga demasiados azúcares que son nocivos para la salud.

Es importante consumir alimentos variados y que contengan mucho líquido como ensaladas de frutas y verduras en diferentes preparaciones.