En las últimas horas se viralizó un video de una desopilante situación: una joven fue a una peluquería a hacerse trenzas “fulani”, también conocidas como “fulani braids”, no quiso pagar y, ante la situación, decidieron dejarla pelada.

El hecho ocurrió el viernes, en una peluquería de Exeiza. Una vez que la clienta tenía el peinado realizado dijo que no le funcionaba la billetera virtual e intentó irse del lugar, con la excusa de que iba a buscar efectivo “a la vuelta”. Sin embargo, la peluquera decidió no dejarla ir.

En primer lugar se conoció un video en TikTok donde se puede ver cómo le cortan las trenzas a la cliente. Luego la estilista una joven llamada May, contó a través de la cuenta de su negocio @dreadlocksmay cómo fue toda la secuencia y explicó por qué tomó esa decisión.

 

La explicación de la peluquera que dejó pelada a su clienta

En el video, la joven contó que en un principio compartió el inicio del procedimiento para realizar las trenzas, donde se podía ver la cara de la clienta.

Ante esto, otra chica que asiste al mismo lugar le advirtió sobre la joven: “Me dijo ‘May, tené cuidado porque esta chica tiene la modalidad de ir a las estéticas, hacerse de todo e irse sin pagar’. Entonces le dije que iba a terminar de trabajar y le iba a avisar para que la espere afuera”, relató la peluquera.

“Ella llegó y se quedó afuera. Ahí empecé a ver como que me estaba haciendo la misma historia de que le habían hackeado la cuenta, que no tenía la plata”, explicó May. “Me decía ‘voy acá a la vuelta y te traigo el efectivo’, pero no accedí a que se vaya”, apuntó la estilista.

Sobre este punto, May contó que le insistió para que pague en el lugar o que alguien más le acerque el dinero hasta el local. No obstante, la otra clienta, que la había advertido previamente, llamó a la Policía.

“Cuando los efectivos llegaron preguntaron cuál era el problema. Les explicamos la situación y hablaron con ella. Después volvieron y nos dijeron que la chica no tenía para pagar y llegamos al acuerdo de que le retiraba las trenzas”, sostuvo. “Cuando se las estaba sacando me dijo que si quería iba y se las hacía devuelta, así que la mejor opción que tomé fue cortárselas de raíz. Le saqué todo porque me pareció que no era justo que juegue con mi trabajo ni con el de ninguna colega. Llegamos a ese acuerdo: yo le retiraba las trenzas y ella no iba detenida. Accedió y fue todo con presencia de la policía”, profundizó la estilista.