En la muestra de arte “Para todes, tode” se expone, entre otras obras de arte, a una Virgen luciendo el pañuelo verde, símbolo del pedido por la ley del aborto legal, seguro y gratuito.

La figura rápidamente generó polémica entre el Gobierno y las autoridades del Centro de la Memoria Haroldo Conti, que funciona en la ex Escuela de Mecánica Superior de la Armada (ESMA).

Frente a esto, hubo una denuncia de dos mujeres contra el director del organismo, Alejandro Kurland, por el delito de “incitar a la violencia y discriminación”.

Por otro lado, diversos grupos que están en contra de la interrupción del embarazo cuestionaron la figura.“Vergonzoso lo que se permite en la vía pública. Evidentemente en ese centro, en la sala 4, donde se realiza una exposición no se respetan mucho los derechos de la mujer”, expresaron desde la agrupación “Marcha de los escarpines”, según señaló el medio vinculado a la Iglesia, ACI prensa.

Kekena Corvalán, la curadora del evento, redactó lo que para ella significa la exposición. “Este proyecto provoca un corte de acontecimientos en el girar de distintas experiencias, recorriendo el arte latinoamericano por fuera de las normas. (…) Sentimos que lo que debe aproximar un encuentro en torno a Géneros y Memoria como un ardor feliz y creativo, es otra interseccionalidad de historias, territorios y cuerpos como modo de inscribir un más allá posible de las relaciones de poder”.

Sin embargo, la Secretaría de Derechos Humanos, se mostró en contra a la muestra a través de su cuenta de Twitter. “Los elementos exhibidos en la muestra “Para todes, tode”, recientemente inaugurada en el Centro Cultural Haroldo Conti, no representan manifestación alguna de la Secretaría de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural de la Nación”, sostuvieron desde el organismo.

 

 

“Los contenidos son de exclusiva responsabilidad de sus autores. Somos respetuosos del arte y de la libertad de expresión, pero no avalamos agravios ni ofensas que puedan afectar a instituciones o colectivos de personas y sus valores religiosos”, agregaron en su descargo.

 

 

“No compartimos algunas manifestaciones y fuimos sorprendidos en nuestra buena fe, al disponer un espacio de un centro cultural público para la exposición de una muestra que contiene elementos ofensivos no informados previamente. Caso contrario, hubiésemos objetado su exhibición”, concluyeron desde la Secretaría que integra el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación Argentina.