El titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, anunció ayer que el ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria, por 15 días, en el conflicto entre el organismo y los empleados de la Dirección General Impositiva, al que le adjudicó un “trasfondo político”. De esta forma “las medidas de fuerza para toda esta semana en la DGI han quedado en suspenso”, dijo Echegaray, en conferencia de prensa.

Así explicó que la convocatoria a un paro de 4 días se originó por la modificación del horario laboral, por lo que consideró que “un paro de este tipo no se justifica en funcionarios que cobran los mejores sueldos del Estado”. Además vinculó al líder de la CGT, Hugo Moyano, con el paro: “El gremio de la DGI tiene un grado de relación con la CGT. En particular, con Moyano hay una vinculación directa de trabajo”.