El presidente Alberto Fernández se reunió este viernes en la Casa de Gobierno con un grupo de familiares de víctimas de femicidio, al cumplirse siete años de la primera movilización del colectivo “Ni Una Menos” y ratificó que desde el Poder Ejecutivo "se escuchó la demanda de las calles" y se diseñaron políticas públicas para acompañar a "quienes atraviesan situaciones de violencia de género".

María Elena Aduriz, madre de Ángeles Rawson, asesinada en el barrio porteño de Palermo en 2013, señaló al término de la reunión que "fue un encuentro muy movilizante" y que se iba "muy motivada" porque "la presencia del Presidente en este día tan especial es darle una voz muy fuerte a la temática y lograr que cada día haya Ni Una Menos".

Néstor García, padre de Micaela García, cuyo caso generó la sanción de la denominada "Ley Micaela" tras su femicidio en la ciudad entrerriana de Gualeguay en 2017, se manifestó "satisfecho" y dijo sentirse "agradecido" por esta reunión, a la que consideró como "muy importante".

"Pudimos conversar con el jefe de Estado y visibilizamos esta temática en un día como éste", señaló García, quien destacó el acompañamiento brindado por el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad.

La titular de esa cartera, Elizabeth Gómez Alcorta, explicó que "varios de los familiares habían solicitado entrevista con el Presidente, quien decidió recibirlos hoy en un día tan sensible y particular para la ciudadanía".

Escuchamos centralmente las particularidades de cada caso, ya que no todas las situaciones son iguales: hay una enorme diferencia cuando un caso tiene justicia y otros no", explicó en declaraciones a la prensa tras el encuentro la ministra Gómez Alcorta."En muchos de los casos aún hay impunidad, en donde los propios familiares tienen que lidiar con la muerte de una hija y luego contra el poder y, en particular, del Poder Judicial", indicó la funcionaria.

Como el femicidio no está tipificado como un delito federal, sino que es jurisdicción de cada una de las provincias, el Presidente se comprometió a hablar con los gobernadores de cada distrito donde aún hay casos particulares sin resolver.

Al respecto, García señaló que Alberto Fernández aclaró que esos casos están sujetos a "la competencia de cada poder del estado en particular y que la injerencia de un poder sobre otro no es saludable para la democracia, pero siempre se puede hacer algo sobre la visibilización y la participación".

Gómez Alcorta, consultada sobre las opiniones de la oposición que afirman que no debería existir un Ministerio de las Mujeres, sostuvo que "la pregunta no es esa, sino qué piensa cada uno y qué vamos a hacer con este problema".

"Es un tema profundo, grave y que implica, en sus peores consecuencias, que nos maten todos los días, que nos violen todos los días. Nosotros estamos absolutamente comprometidos y convencidos de que el único camino para reducir las violencias y por qué no, para erradicarlas, es con más Estado. Si nosotros como Estado no invertimos, como se invierte en salud, si uno quiere erradicar el sarampión, se necesitó tiempo, avances científicos, inversión, compromiso de todos los Estados y esto es exactamente lo mismo", aseveró.

La secretaria Legal y Técnica de la Presidencia, Vilma Ibarra, y la portavoz Gabriela Cerruti, también estuvieron en esta reunión.

Por su parte, Claudia Acuña, representante de la agrupación Familias Sobrevivientes de Femicidios, apuntó que uno de los reclamos más urgentes es "la efectiva aplicación de la ley Brisa", que le otorga una reparación económica para los hijos de las víctimas de femicidios.

"Es un reclamo de las familias porque está mal implementada esa ley. Se tarda entre tres o cuatro años en obtener un subsidio. Es algo que debe otorgarse de forma inmediata tras el femicidio", sostuvo Acuña en declaraciones a Télam.

La referente que representa a las víctimas precisó que "los otros dos pedidos son que se trabaje en una reforma judicial, de acceso igualitario y el trabajo en prevención, porque todo femicidio es evitable".

Participaron del encuentro, que se desarrolló en el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada, Marta Montero, mamá de Lucía Pérez; Mónica Ferreyra y Ricardo Fulles, padres de Araceli Fulles; Alfredo Barrera, papá de Carla Soggiu; Alberto Basaldúa y Dora Reyes, padres de Cecilia Basaldúa; Blanca Ozan, mamá de Agustina Fredes; y César Ezequiel Moscoso y Wanda Banegas, familiares de Katherine Moscoso.

Estuvieron presentes también Facundo Ortiz y Marisa Rodríguez, padres de Luna Ortiz; Gabriela Monzón y Gabriel López, mamá y hermano de Gisela López; Flavia Pastori, hermana de Sandra Pastori; María Elena Aduriz, mamá de Ángeles Rawson; Beatriz Regal y Jorge Tadei, padres de Wanda Tadei.

También estuvieron presentes, Analía Romero, mamá de Camila Flores; Luciana Orieta, familiar de Mariela Orieta; Néstor García y Andrea Lescano, familiares de Micaela García; María Rosa Leonelli y Antonella Valdez, familiares de Cintia Cerrudo; y Pablo Ruiz Peralta.