El Consejo de Seguridad Interior, integrado por las provincias argentinas, aprobó ayer por mayoría el nuevo protocolo para la actuación de las fuerzas de seguridad en las manifestaciones públicas con el fin de ‘que la calle sea un caos‘ por los piquetes.
El nuevo documento establece que en caso de un corte de la vía pública o carretera en el marco de una protesta ‘se establecerá un
espacio de negociación‘ con los manifestantes y ‘se dará aviso a la Justicia‘. El jefe del operativo de seguridad impartirá la orden a través de altavoces, megáfonos o a viva voz de que los manifestantes deben desistir del corte. Si los manifestantes no cumplieren con la orden, se procederá a intervenir y disolver la protesta.
‘Este Ministerio no va a permitir que la calle sea un caos‘, dijo en un comunicado la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, quien encabezó la primera reunión del año del Consejo de Seguridad Interior. El protocolo establece que ‘el uso de la fuerza debe limitarse siempre al mínimo posible‘. ‘No vamos a tolerar la extorsión. Si quieren que los escuchemos, los vamos a escuchar‘, afirmó Bullrich. Efe