Argentina es el país con más hombres adultos obesos de todo Latinoamérica y el Caribe, con un 26,7 por ciento de su población masculina afectada por este desequilibrio que implica importantes riesgos para la salud, según un informe presentado ayer por la agencia de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

El relevamiento "Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional en América latina y el Caribe" presentado ayer en Santiago de Chile, muestra además que el hambre aumentó por primera vez el año pasado en la región, después de más de una década de retroceso, ubicándose un 6% por encima de la medición anterior.

Es que en seis de los 32 países medidos -entre los que se encuentra Argentina por una diferencia de sólo 0,2 puntos porcentuales- aumentó la desnutrición, que ya afecta a 42,5 millones de habitantes de la región, lo que representa un incremento de 2,4 millones de personas.

La contracara de la subalimentación es la obesidad, que representa igualmente un problema de salud pública en todos los países de la región de las Américas.

Según el informe, Argentina tiene la mayor proporción de hombres adultos obesos (26,7%), seguido por Chile (24,8 por ciento), Bahamas (24,6%) y México (23,7%).

El informe demuestra también que la obesidad sigue siendo una problemática de salud que afecta mucho más a la población femenina y Argentina no es ajena a este fenómeno: el 30,1% de las mujeres sufre obesidad contra el 26,7% de los hombres.Y el país se encuentra quinto entre las naciones sudamericanas con mayor proporción de población femenina adulta obesa, después de Chile (32,8%), Surinam (32,2), Uruguay (31,3) y Guyana (30).

En relación a Latinoamérica y el Caribe en su totalidad, Argentina se encuentra en décimo sexta posición entre los países con mayor proporción de mujeres adultas obesas.

El informe explica que "24 países de América latina y el Caribe presentan una proporción de personas obesas en valores cercanos o superiores al 20 por ciento" y a nivel regional "todos los países han incrementado sus tasas entre los años 1980 y 2014". En Antigua y Barbuda, Argentina, Trinidad y Tobago y Uruguay, por ejemplo, cerca del 29% de la población es obesa; Chile en tanto, alcanza el 30; Bahamas, un 32.

Por el contrario, las menores tasas se encuentran en Haití, con un 11% de la población, y Bolivia, Guatemala, Honduras, Paraguay, Nicaragua y Ecuador, que presentan tasas inferiores al 20%.

"El consumo de productos ultra-procesados está directamente relacionado con el incremento en la prevalencia del sobrepeso y obesidad, así como de las enfermedades no transmisibles", afirmó la Directora de la OPS, Carissa F. Etienne.

FAO y OPS advirtieron hoy que si estos indicadores no se modifican, la Región no podrá cumplir con la meta de erradicar el hambre y la malnutrición en 2030, comprometida en los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

"Con el aumento del hambre, es muy difícil que la región alcance el Objetivo de Desarrollo Sostenible 2 Hambre Cero", dijo Julio Berdegué, Representante Regional de la FAO.

Si bien los niveles de hambre se redujeron 21 países de la Región y éstos siguen siendo bajos en comparación con el resto del mundo, el número absoluto de personas con hambre aumentó en Latinoamérica y el Caribe, "y hay señales de que la situación se está deteriorando, especialmente en Sudamérica, donde el hambre creció de 5% en 2015 a 5,6% en 2016".

La peor situación en términos de prevalencia de subalimentación la presenta Haití, donde casi el 47% de la población, es decir 5 millones de personas, sufre hambre. Este número representa casi dos tercios de toda la subalimentación en los países del Caribe.