El presidente José Mujica autorizó ayer aumentar la producción de pasta de celulosa en la papelera que el grupo finlandés UPM -ex Botnia- tiene en Fray Bentos lo que reabrió la crisis diplomática con Uruguay ya que Argentina volverá a recurrir a la Corte de La Haya por una nueva violación del Estatuto del Río Uruguay por parte de Montevideo.

Mujica dio luz verde al aumento de producción de pasta de celulosa en la planta de UPM de hasta 100.000 toneladas de las 200.000 que había pedido, y reconoció que esa decisión ‘puede crear tensiones y malentendidos‘ con la Argentina. Y la reacción oficial o se hizo esperar.

A través del canciller, Héctor Timerman, Argentina señaló que ‘la decisión unilateral de Uruguay deja a nuestro país en la obligación jurídica de recurrir a la Corte de La Haya‘, tras lo cual se indicó que el gobierno, ‘de la misma manera‘ con la que se opuso ‘a los fondos buitres‘, impedirá ‘ser doblegado por una empresa trasnacional‘ como la pastera de origen finlandés.

Con la decisión de Mujica la papelera pasará a producir 1,2 millones de toneladas de pasta de celulosa al año de desde las actuales 1,1millones. La pastera había solicitado un incremento de hasta 1,3 millones de toneladas, dado que un mes antes de finalizar su ciclo anual logró cumplir con el tope máximo autorizado y amenaza con suspensiones o despidos.

Mujica admitió que su decisión causará una crisis con Argentina, uno de los principales socios comerciales de Uruguay, pero dijo que su función es defender los intereses de su país.

‘A mí me duele mucho, seguramente que puede crear (la decisión), presiones, malentendidos, pero nadie va a separar en mi corazón el cariño y el respeto que le tengo al pueblo argentino‘, afirmó el mandatario en un discurso televisado.

El mandatario aclaró que el permiso a UPM es revocable si no cumple con exigencias medioambientales. En este sentido, informó que ‘estamos poniendo como condición, el rebajar el contenido de fósforo que tiene precisamente el desecho que va al río‘. ‘Me siento federal y artiguista pero estoy en Uruguay y debo cuidar el trabajo de los uruguayos, en la cadena forestal‘, justificó.

Mujica le había comunicado su decisión el lunes en Buenos Aires a su par, Cristina Fernández. Argentina y Uruguay ya mantuvieron un largo litigio en La Haya por la planta de celulosa. En el 2010, la corte dictaminó que no había indicios de que la pastera contaminara al río Uruguay, pero dijo que Montevideo violó un acuerdo binacional al no consultar a Buenos Aires antes de permitir la construcción de la papelera, una de las mayores inversiones en la historia uruguaya.