La esposa del intendente de la localidad puntana de La Calera fue asesinada ayer en la mañana de varios balazos en la puerta de su casa de la capital provincial por desconocidos que se movilizaban en moto, y los investigadores del caso procuraban determinar si le dispararon porque resistió a un robo o si se trató de un ajuste de cuentas con su marido.
El hecho se registró minutos antes de las 6.30, cuando la víctima, identificada como Romina Celeste Aguilar (32), salía de la vivienda que comparte con el jefe comunal de La Calera, Diego Hernán Lorenzetti; la casa 1 de la manzana 78 del barrio FAECAP, en el norte de la ciudad de San Luis. La mujer acababa de sacar su camioneta Renault Duster negra para recorrer, como lo hacía todos los sábados, los 57 km que separan San Luis de La Calera, del noroeste provincial, donde cursaba el final de la escuela secundaria a través del programa Plan de Inclusión Educativo (PIE).
Según relataron voceros policiales, Aguilar bajó del vehículo unos momentos para cerrar el portón de la casa, cuando fue sorprendida por dos hombres jóvenes armados que circulaban en una moto, que la tomaron de la ropa, la arrastraron unos diez metros por el suelo y luego le dispararon entre dos y cuatro tiros.
La mujer falleció de forma prácticamente instantánea, mientras que los agresores volvieron a subir a su rodado y se alejaron del lugar a toda velocidad.
Según el relato de algunos vecinos, los atacantes en moto vestían ropa ‘de verano‘ y calzaban ojotas. Para los investigadores, el asesinato se llevó a cabo con un arma de guerra, que sería calibre 11,25.
‘Mandaron a matar a mi mujer, cómo le explico esto a mis hijos‘, dijo el intendente Lorenzetti dando por sentado que se trató de un crimen por encargo.