El empresario Fabián Gutiérrez, exsecretario de Néstor y Cristina Kirchner, fue encontrado asesinado y enterrado ayer en una casa de la localidad santacruceña de El Calafate y por el crimen fueron detenidos cuatro sospechosos, uno de los cuales confesó el hecho ante la Justicia.

Gutiérrez llevaba dos días desaparecido y, aunque el juez que investiga el hecho descartó ayer que se trate de un crimen político, el caso puso en alerta a la oposición que no tardó en llamar a este nuevo hecho delictivo que roza las aristas del poder como "el nuevo caso Nisman (Alberto)", en relación a la dudosa muerte del exfiscal de la causa AMIA que fue encontrado muerto a horas de acusar a Cristina Kirchner por "Traición a la Patria" en el Congreso por el Memorándum firmado con Irán.

Gutiérrez era otra pieza clave en la causa de "los cuadernos de las coimas" ya que sorpresivamente se presentó como testigo arrepentido y en su declaración indagatoria complicó la situación procesal de la expresidenta cuando ratificó los dichos del principal testigo de la causa, el chofer Oscar Centeno, sobre el traslado sistemáticos de bolsos presumiblemente con dinero a la Casa Rosada o desde Buenos Aires a Santa Cruz.

El hallazgo del cuerpo de Gutiérrez se concretó ayer por la mañana en los fondos de una casa de la calle Cañadón Seco, del barrio Aeropuerto Viejo, de esa localidad turística ubicada a unos 250 km de Río Gallegos, y de acuerdo a los primeros resultados de los peritajes realizados por los médicos forenses que revisaron el cuerpo, Gutiérrez presentaba golpes principalmente en la cabeza y un corte en el cuello.

El juez de instrucción Penal de El Calafate a cargo del caso, Carlos Narvarte, aseguró a la prensa que el cuerpo fue hallado envuelto en una sábana, que estaba vestido y que la principal hipótesis sobre el hecho apunta a un crimen vinculado a un robo, con lo cual descartó el móvil de un crimen político.

"Yo no tengo el móvil político dentro de las hipótesis que estoy trabajando", dijo el magistrado en declaraciones al canal A24, donde además aseguró que aún aguarda distintos peritajes "importantes para la causa", como por ejemplo a los teléfonos celulares secuestrados en el marco de la pesquisa, entre ellos el de la víctima y de los cuatro detenidos.

Todo comenzó el viernes al mediodía cuando se recibió una denuncia sobre la desaparición de Gutiérrez, quien no contestaba las llamadas y no había sido hallado en su domicilio desde el jueves. De inmediato, por orden del juez Narvarte se realizaron las primeras diligencias en el domicilio de El Calafate del exsecretario de los Kirchner, quien vivía solo en una casa de la calle Perkins y padre Alberto D"Agostini de la villa turística, la cual se hallaba totalmente revuelta.

En el lugar fue hallada una campera con sangre, precintos plásticos y manchas de sangre en distintos sectores de la casa.

Los pesquisas de la Policía de Santa Cruz determinaron luego que durante la noche previa Gutiérrez había sido visto con un joven de unos 20 años que era conocido suyo, por lo que los investigadores se dirigieron a su domicilio.

Ese joven, identificado por los investigadores judiciales y policiales como Facundo Zaeta, quedó demorado y es uno de los principales sospechosos del crimen. Tras esta detención, el juez ordenó otros tres allanamientos en los que fueron detenidos otros tres sospechosos, uno de ellos hermano de Zaeta y todos de entre 20 y 25 años.

Uno de los cuatro detenidos fue quien declaró durante una indagatoria ante el juez Narvarte y aportó los datos fundamentales para el hallazgo del cadáver de Gutiérrez.

"La primera persona que fue indagada aportó datos sobre lo que había ocurrido y dónde podría encontrarse el cuerpo, por lo que gracias al trabajo de criminalística se logró hallar el cuerpo enterrado en el terreno próximo a una casa", dijo el magistrado.

"Estaba enterrado, vestido y envuelto en una sábana, en principio presenta un golpe en la cabeza", aseguró el juez esta mañana a los medios locales, aunque luego aclaró que "además tenía lesiones de arma blanca, una de ellas en el cuello".

El propio juez reconoció que una de las posibilidades es que Gutiérrez haya sido "torturado" a golpes por sus atacantes para que revele datos sobre el lugar donde mantenía guardado dinero.

Robo, desaveniencia o un drama pasional

El juez Carlos Navarrete señaló que aunque "no se conoce el móvil del homicidio", este podría ser por "robo, pasional o por alguna desavenencia" ya que uno de los detenidos "tenía una vinculación más estrecha" (más que amigos) y se encontraron objetos de la víctima en la casa. "El móvil pudo haber sido -porque faltaron un televisor y un equipo de música- sentimental, donde se produjo un desacuerdo y comenzó la agresión, o pudo haber sido un arreglo, una cosa premeditada para apoderarse de las cosas. No tengo ningún elemento que me indique que pudo haber sido una cuestión política", declaró el juez. También reveló que el homicidio habría sido cometido en la casa de Gutiérrez y que su cuerpo habría sido trasladado en su propia camioneta para ocultarlo.

Cadete, secretario y confidente de los Kirchner

El Calafate. Los allanamientos en la casa de Gutiérrez, en la localidad santacruceña de El Calafate.
 


El empresario Víctor Fabián Gutiérrez era miembro de una reconocida familia peronista de Río Gallegos (Santa Cruz), donde conoció al expresidente Néstor Kirchner y a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, y llegó a ser secretario de ambos.

El año pasado, había sido procesado por ser el supuesto coautor del delito de lavado de dinero en el marco de un expediente vinculado con la causa de los Cuadernos, luego de que se convirtiera en "arrepentido", aunque nunca aportó hechos significativos en la causa.

En una de las tantas jornadas frenéticas que se vivían en los tribunales por el caso de los cuadernos, con anotaciones sobre coimas vinculadas con la obra pública, Gutiérrez, que había sido detenido, declaró como imputado colaborador y recuperó su libertad.

Gutiérrez pasó de ser uno de los colaboradores más estrechos de Cristina Kirchner a uno de los imputados colaboradores que aportó algunas de las pruebas más relevantes para el avance de la investigación.

Gutiérrez fue quien aseguró que en una residencia de los Kirchner se construyó una bóveda para guardar bolsos con dinero y a la que "sólo ingresaba Néstor Kirchner".

Fabián Gutiérrez fue cadete, secretario, confidente de Néstor y Cristina Kirchner y también fue investigado por cómo hizo su patrimonio mientras estaba bajo la protección del poder. Su patrimonio: 36 inmuebles en El Calafate, Río Gallegos y Ushuaia, unos 35 autos (la mayoría de lujo) y al menos tres embarcaciones.

En 1994, con 21 años, ingresó a trabajar como cadete a la Caja de Servicios Sociales. Al año siguiente empezaría a formar parte del grupo de asistentes de Néstor Kirchner.

Gutiérrez se desempeñó entre 2003 y 2005 como secretario de la Presidencia de la Nación en el mandato de Néstor Kirchner y fue secretario adjunto de la Presidencia entre diciembre de 2007 y enero de 2010, durante el mandato de Cristina Fernández de Kirchner. También en algunos periodos acompañó a la vicepresidenta Cristina Kirchner cuando fue senadora y diputada nacional.