La presidenta Cristina Fernández padece un cuadro ‘compatible con una bursitis del trocanter izquierdo‘, una inflamación dolorosa de la bolsa sinovial, que amortigua el hueso puntudo de la cadera, según el segundo parte médico difundido por el Hospital Universitario Austral tras los estudios realizados a la jefa de Estado. A la mandataria se le indicó ‘tratamiento fisiokinésico‘ y el establecimiento sanitario anticipó que la presidenta ‘será controlada periódicamente para constatar su evolución‘. ‘Luego de examinar a la doctora Cristina Fernández de Kirchner y evaluar los estudios radiológicos y de resonancia magnética nuclear, se ha observado una imagen compatible con una bursitis del trocante izquierdo‘, se enfatizó en el parte médico, firmado por los doctores Carlos Autorino, Ruy Lloyd y Federico Burgo, del equipo de Cadera y Columna del hospital.
Los profesionales añadieron que a la jefa de Estado ‘se le ha indicado tratamiento fisiokinésico y será controlada periódicamente para constatar su evolución‘.
La presidenta realizó el miércoles una consulta programada en el Hospital Universitario Austral a raíz de una ‘lumbociatalgia‘, síntoma conocido popularmente como ‘ciática‘.
La bursitis trocantérea es la inflamación de las bursas serosas, un saco lleno de fluido que proporciona un “acolchonamiento” entre los huesos, tendones y/o músculos en el contorno de una articulación, que se sitúan en la extremidad inicial del fémur. Se trata de una causa frecuente de dolor procedente de las estructuras que se hayan alrededor de la cadera.
El trocánter es un punto de unión para los músculos que mueven la articulación de la cadera. Tiene una bolsa que la cubre, la que en ocasiones se irrita dando lugar a la bursitis de cadera.
Los principales síntomas de esta lesión son dolor lateral del muslo, irritación por alguna prenda de vestir, un poco de cojera, dificultad para subir o bajar escaleras, para sentarse y para agacharse, entre otros.
Ésta es una lesión cuyo tratamiento requiere de mucha paciencia de parte del paciente, ya que es lento y difícil, lo que hace que muchas veces la persona se desencante de lo que se está realizando. Además, la solución no es una y después de meses de tratamiento puede ser que el dolor pase. Ayer, la mandataria retomó su agenda por la tarde.
