El gobernador rionegrino, Alberto Weretilneck, anunció que impulsará una enmienda constitucional para garantizar la participación popular en la designación de jueces provinciales y sugirió la reforma del Consejo de la Magistratura. Así, Weretilneck se convirtió en el primer gobernador del país que intenta reflotar el fallido proyecto de reforma judicial que impulsaba la presidenta, Cristina Fernández, con elección popular de consejeros en la Magistratura nacional, que finalmente la Corte Suprema declaró inconstitucional.

‘Ha llegado la hora de modificar, vía enmienda, los artículos de la Constitución que mandan la forma de elección de los jueces de la provincia y poder así asegurar la participación popular para la evaluación y designación de los funcionarios judiciales‘, sostuvo el gobernador al hablar en la jura de tres nuevos jueces del Superior Tribunal de Justicia de Río Negro.

Weretilneck argumentó que ‘la importancia del Poder Judicial exige que el pueblo tenga a su alcance las herramientas para participar, decidir y controlar lo que sucede en la Justicia‘.

En el mismo sentido, consideró que ‘es absolutamente falso y distorsiona la democracia pensar que el Poder Judicial es una institución aislada de los requerimientos de la gente y del mandato popular‘.

‘Este acto de hoy es consecuencia del mandato popular, porque la renovación total del Superior Tribunal fue un compromiso de quienes hoy tenemos la obligación de conducir los destinos de la provincia‘, subrayó el mandatario rionegrino. Dijo también que ‘mayor participación de la gente en la elección de los jueces no significa menor independencia judicial‘.

‘¿Por qué no pensar en la incorporación de familiares de las víctimas, de los trabajadores judiciales, de los municipios y los líderes locales… las organizaciones no gubernamentales, participando en el Consejo de la Magistratura para elección de jueces?‘, formuló como hipótesis. Weretilneck destacó el ingreso de más de 70 magistrados en cargos vacantes desde 2012.