La decisión que obligó a declinar su candidatura dejó al embajador Daniel Scioli dolido y enojado. Así se lo expresó el propio Scioli en una charla telefónica a la Vicepresidenta, quien ayer, durante un acto, explicitara que nunca se le cruzó por la cabeza intervenir para que el ex motonauta se bajara de la contienda electoral.

“Nunca me trataron tan mal como en esta negociación. Nunca nadie me trató tan mal como el albertismo. Me dijeron que no había manera de que me bajaran de las PASO”, le contó el embajador a CFK. Ese respaldo se lo habían expresado personalmente el presidente Alberto Fernández, la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, y el canciller Santiago Cafiero, durante una cena en Villa La Ñata, después del acto de lanzamiento. Pero el viernes, horas después de esa comida, el panorama mutó por completo.

Esta mañana, el propio Cafiero habló sobre la decisión de bajar a Scioli. En una entrevista concedida al periodista Jorge Fontevecchia, el Canciller descartó que haya habido una traición o destrato por parte del presidente Alberto Fernández y rechazó discutir versiones sobre cómo se tomó la decisión porque no contribuyen en nada.

“Absolutamente no”, respondió cuando se le preguntó por el tuit de la hija del embajador luego del cierre de listas, quien habló de traición. “Yo soy amigo (de Scioli) y estaba absolutamente convencido de que en el camino de la PASO la candidatura de Daniel era potente. Creo en él como dirigente político. Pero se modificó el contexto y el sentido de responsabilidad que tenemos (los dirigentes) es el de aceptar y escuchar otras voces. No se trata de avanzar sin escuchar al resto”, señaló.

En este marco, Cafiero recordó que el presidente y Scioli son dos dirigentes que tiene una gran amistad y que se conocen hace años. “La relación personal está intacta. Además, hay una gran valoración de Scioli en Brasil. La tarea que ha hecho es enorme y destacada no solo por el oficialismo, también por la oposición”, enfatizó el Canciller. “Daniel ha sido muy útil para poner en funcionamiento los mecanismos comerciales para que Argentina y Brasil continúen siendo los socios, los motorcitos del Mercosur y de la región”, añadió.

Cafiero estuvo junto a Scioli el jueves por noche. Sin embargo, no pasaba por su cabeza que 24 horas después los hechos iban a tomar el curso que tomaron. “La unidad del peronismo es la dinámica de lo impensado”, resumió.

“Sigo creyendo que la participación política amplia nuestro espacio, pero también hay que escuchar todas las voces. Los liderazgos de nuestro espacio acordaron en avanzar en una fórmula de unidad con Massa - Rossi. Y el sentido de la responsabilidad militante es cuando el peronismo se une, es ponerse a disposición y trabajar sin pedir nada a cambio”, resaltó.

En tal sentido, insistió: “Creo que la participación siempre es útil, la participación genera volumen. Victoria (Tolosa Paz) y yo estábamos muy comprometidos con las PASO, teniendo en cuenta que Cristina y Alberto no iban a estar en las boletas, entendíamos que las PASO eran una posibilidad. Pero luego hubo una solución superadora y hoy estamos trabajando y tirando para el mismo lugar”.

Asimismo, consideró que hablar de lo que no sucedió es perder el tiempo. “Hoy el tiempo lo tenemos que dedicar a construir una estrategia ganadora para el peronismo, para Unión por la Patria, donde todos los espacios estemos en un mismo camino y donde le ofrezcamos con mucha claridad a la ciudadanía un programa de gobierno y desarrollo que permita que la Argentina despegue de una buena vez”.

“Cada uno tiene su apreciación de cómo fue el cierre y todo el derrotero y me parece razonable. Hoy los tiempos son otros. Hoy tenemos que trabajar por la candidatura de Sergio Massa. Entre todos los compañeros tenemos que trabajar y aportar para que esa candidatura sea la que los argentinos elijan con esperanza, con actitud positiva, como alternativa a la derecha antidemocrática de las otras opciones”, añadió.

Para finalizar, Cafiero recordó que el peronismo es una construcción colectiva. “Acá no hay dueños ni alguien que dirija hegemónicamente los destinos del movimiento. Nadie va a trabajar en contra de la unidad de peronismo”, concluyó.