Carrió. Se enfureció con Garavano cuando dijo que "nunca es bueno que se pida la detención o se detenga de manera preventiva a un expresidente".


La diputada, Elisa Carrió, tensó al máximo la cuerda en su relación con el Gobierno con  la amenaza de pedir el juicio político del ministro de Justicia, German Garavano, porque en declaraciones radiales no avaló la detención preventiva de Cristina Kirchner, por  las causas de corrupción en las que está procesada.

Concretamente, Garavano había dicho: "por regla general, nunca es bueno que se pida la detención o se detenga preventivamente a un expresidente", al referirse a la causa de los cuadernos de las coimas. En ese sentido, Garavano, en diálogo con radio AM 530, sostuvo que "no hay elementos para pensar que pueda fugarse o entorpecer la causa".

"A priori no parece bueno el desafuero y la detención, siendo que se pueden dar explicaciones en el marco de un juicio oral, pero lo tendrá que resolver la Justicia y el Senado", agregó.

Para Garavano, la prisión preventiva es "una medida excepcional que hay que usar restrictivamente", y aclaró: "Por eso mandamos al Senado un proyecto que establece pautas objetivas para la prisión preventiva para que no haya tanta arbitrariedad". "Argentina ha tenido un uso errático de la prisión preventiva y nunca se han fijado normas claras", subrayó.

Estas palabras fue la gota que rebalsó el vaso para Carrió que desde hace rato viene enfrentada con el ministro de Justicia. "Sus dichos son una vergüenza para la República y la división de poderes", disparó la líder de la Coalición Cívica en su cuenta de Twitter. 

Fuentes de la CC aseguraron que Carrió ya le encargó a su equipo que elabore el proyecto que se presentará en Diputados para comenzar el juicio político al ministro, un proceso que, si consigue los apoyos necesarios, puede terminar con la destitución. Este plan pone en jaque la estrategia del Gobierno de que Cristina permanezca en libertad para seguirle sacando provecho a la polarización con la expresidenta de cara al 2019. Para que prospere un dictamen favorable al juicio político necesita en la comisión mayoría simple, pero en el recinto requiere del voto de los dos tercios de los presentes. De todos modos, para que se trate inicialmente en comisión debería darse un quiebre en el bloque de Cambiemos y que el titular de la comisión convoque al tratamiento del tema.
 


Renuncia

Elisa Carrió, presentó ayer su renuncia "indeclinable" a la postulación para presidir la Comisión Bicameral de Control del Ministerio Público Fiscal, cuya conducción no pudo asumir el martes debido a que el peronismo no dio quórum para que asuma este cargo.