La sesión se Diputados de este miércoles terminó con escándalo. Debió ser levantada luego de que Elisa Carrió arremetiera contra lo que llamó “el progresismo estúpido”, ante el rechazo de Margarita Stolbizer y del tucumano Federico Masso, de Libres del Sur, a un proyecto de su autoría sobre donación de alimentos.

 

La massista Carla Pitiot había hecho moción para que el proyecto volviera a comisión por la “sensibilidad especial” del tema, y porque no había podido ser debatido en profundidad, según explicó. Todos votaron a favor, incluido Cambiemos, y Carrió dijo que “no tenía problemas” en ese punto.

 

Pero la líder de la Coalición Cívica mostró su enojó con las posiciones previas de Stolbizer y de Masso, que habían cuestionado “ética y jurídicamente” el proyecto, el rol de las empresas donantes y defendido –caso de Masso- el rol del Estado en garantizar que no haya hambre en el país. “Los bancos de alimentos no están integrados por empresas. Son ONG que buscan donaciones. No estamos privatizando la alimentación de la Nación”, sostuvo Carrió.

 

Pero luego agregó: “Si alguien que le sobra, ¿no puede donar en condiciones de salubridad? Creo que estamos todos locos, que hay un progresismo estúpido que cree que es preferible que vayan a buscar a las bolsas de basura. ¡Estoy harta del progresismo estúpido! ¿Que quieren que se mueran de hambre? ¡Déjenme de jorobar!”.

 

 

Sus palabras cayeron muy mal en la cámara. Entre abucheos y gritos, Progresistas (Stolbizer, los socialistas, Libres), el massismo y el FpV se levantaron de sus bancas. Ya no había quórum, como consecuencia, la sesión pasó a cuarto intermedio hasta el miércoles próximo.