Los adolescentes de entre 13 y 17 años podrán abrir cajas de ahorro sin la necesidad de estar acompañados por un mayor o responsable legal, con lo cual el titular de la cuenta será el joven.

La cuenta será en pesos y no tendrá costos de apertura, de mantenimiento, ni por la utilización de los cajeros automáticos de la propia entidad financiera o el home banking. La cuenta estará asociada a una tarjeta de débito mediante la cual el adolescente podrá hacer compras, transferencias, extracciones en cajeros automáticos o en puntos de venta o por ventanilla y otras operaciones cotidianas. Desde esa cuenta se podrán constituir depósitos a plazo fijo en pesos, en Unidades de Valor Adquisitivo actualizables por CER (UVA) y en Unidades de Vivienda actualizables por ICC (UVI), de modo tal de poner a disposición de los adolescentes un instrumento de ahorro de largo plazo.