La dirigencia del radicalismo ya comenzó a debatir estrategias y nombres de las futuras autoridades que conducirán el Comité Nacional, las que serán elegidas en el plenario de delegados convocado para el viernes 4 de diciembre.
‘La conducción que viene tiene que ser una conducción integrada que le devuelva al radicalismo, dentro de Cambiemos, una fortaleza institucional y política, que le permita acompañar un potencial gobierno‘, explicó el secretario de Organización y Formación Política, Walter Ceballos, en diálogo con DyN.
Si bien, los principales dirigentes de la UCR evitaron dar nombres, hay una coincidencia generalizada de que la nueva conducción ‘estará muy fuertemente vinculada a la impronta‘ de la asamblea de Gualeguaychú, cuando se habilitó el acuerdo con el PRO y la Coalición Cívica. Está claro que las variantes para conducir a la UCR dependerán del resultado del balotaje del domingo, ya que un triunfo de Mauricio Macri habilitaría el ingreso al gobierno de varios dirigentes radicales.
En principio, un importante operador político confirmó que el senador Ernesto Sanz, ‘se ha excluido‘ de la competencia por la presidencia del Comité y no buscará la reelección, pese a que ‘contaría con los dos tercios que exige la carta orgánica‘ del partido. No obstante, la fuente aclaró que el mendocino se bajó la lucha por la conducción de la UCR porque ‘coincide en que hay que facilitar un proceso de mayor fortaleza e integración pos Gualeguaychú, en busca de un consenso y una mayoría ampliada‘.
Un triunfo de Macri llevaría a Sanz al Ministerio de Justicia y abriría la puerta al gabinete nacional de otros dirigentes como José Cano y Julio Martínez, que hicieron ‘una valorable‘ elección en Tucumán y La Rioja, respectivamente, pese a que no pudieron llegar a la gobernación.
El plan del oficialismo partidario se completaría con la postulación de Julio Cobos -electo senador nacional- como titular del Comité Nacional, lo que lo dejaría virtualmente afuera de la competencia por la presidencia provisional de la Cámara alta. No obstante, desde el cobismo esquivaron hablar del tema, pero advirtieron que ‘es claro‘ que el actual diputado tiene la delantera para ser el segundo en la línea de sucesión, en caso de un gobierno de Cambiemos, porque ‘le saca varios cuerpos‘ al resto de los senadores que forman parte del bloque.
De la posibilidad de conducir el partido, desde el cobismo ni lo mencionaron aunque si confirmaron que será el delegado por la UCR de Mendoza en la reunión del 4 de diciembre.
‘Es mucho más importante que los nombres, el rol que le va a caber al radicalismo en 2016 y 2017‘, insistió, por su parte, Ceballos.
En medio de esta disputa se asomó el senador y gobernador electo de Jujuy, Gerardo Morales, quien aspira a jugar un papel importante en la negociación de autoridades. En el orden parlamentario y previo al balotaje, en el radicalismo ya dan como hecho la conformación de un interbloque de Cambiemos en el que confluyan el PRO, la UCR y la Coalición Cívica. También habría consenso para que el chaqueño Angel Rozas reemplace a Morales en la presidencia del bloque en el Senado y Mario Negri continúe como jefe de la bancada en Diputados.

