El periodista y médico Nelson Castro explicó por televisión las causas que, según su análisis de la autopsia, llevaron a la muerte a la diputada y periodista Débora Pérez Volpin mientras era sometida a una endoscopia en el sanatorio de la Trinidad.

"Se trata de un caso excepcional por lo raro, que casi amerita ser presentado y publicado en las revistas especializadas de gastroenterología y medicina legal", consideró Castro.

Según explicó, "el hecho que llevó a esta catástrofe fue la perforación del esófago, de más o menos dos o tres milímetros". Esa lesión -precisó- se produjo "en agudo", es decir, que no existía al comienzo del estudio.

La perforación, contó, generó un ingreso de aire que originó un enfisema subcutáneo (presencia de aire debajo de la piel). Ese cuadro fue de tal magnitud que comprimió todos los elementos respiratorios. Incluso -contó- se encontró aire en el cerebro.

Según indicó, el ingreso de aire tuvo tanta importancia que Débora murió en forma instantánea.

La autopsia "es un estudio muy concluyente que origina preguntas". Y en esa línea, consideró que "lo que hay que determinar es la responsabilidad de los profesionales que actuaron; habrá que ver si hubo impericia, negligencia o imprudencia".

Para Nelson Castro, la historia clínica tiene una contradicción respecto al uso del endoscopio. "Hay que determinar qué pasó con ese instrumento, en qué condiciones se encontraba y cual fue la fuente de oxígeno para la insuflación: a los peritos del Cuerpo Médico Forense les llamó la atención el nivel de las lesiones", cerró.

Fuente: Clarín