En un día de vaivenes. Macri llega a la Casa Rosada para la reunión de Gabinete. A la salida dijo a los periodistas que está "tranquilo".

 

Los contribuyentes que quieran pagar sus deudas previsionales con letras cuyos pagos fueron reprogramados, podrán comprarlas en el mercado secundario, donde su cotización está muy deprimida, y presentárselos a la AFIP que los tomará con el valor técnico, informó ayer el director del organismo Leandro Cuccioli. 

"No es necesario que quien presente el título sea el tenedor original. Quien lo desee puede ir al mercado, comprarlo y nosotros lo tomaremos al valor técnico", dijo el funcionario.

El Gobierno habilitó la posibilidad de que los contribuyentes que tienen Letes, Lecaps, Lelink y Lecer, cuyos vencimientos fueron reprogramados la semana pasada, puedan utilizarlos para pagar los aportes y contribuciones a la seguridad social adeudadas hasta el 31 de julio último.

Para esto, el contribuyente ordenará la transferencia desde la plataforma donde opera sus títulos a la AFIP. 

La Caja de Valores informará los bonos electrónicos generados y la AFIP procesará los bonos electrónicos recibidos. El contribuyente visualizará el crédito de estos bonos en la cuenta tributaria y los utilizará para pagar la deuda de aportes y contribuciones de seguridad social. 

Desde del 15 de este mes y hasta el 30 de noviembre de este año se podrán ordenar transferencias de bonos a la AFIP.

El economista Hernan Letcher dijo que gran parte de las letras que se reperfilan están en manos de las provincias, que deberán acudir al mercado secundario y perder buena parte del valor de sus posesiones para abonar compromisos de corto plazo. 

Por su parte, el secretario de Finanzas, Santiago Bausili, afirmó ayer que el Gobierno "tiene la capacidad de reperfilar el vencimiento de los bonos de los próximos 10 años, probablemente en un proceso que duraría entre 6 y 8 semanas", para lo cual se requiere "el apoyo de la oposición, que convalide el esfuerzo y legitimice a esta administración como contraparte de esa negociación". "La segunda condición es, obviamente, convencer a los inversores, los tenedores de estos títulos, de que el reperfilamiento es suficiente para mejorar las perspectivas de sostenibilidad de la deuda argentina", dijo Bausili.