El juicio oral y público contra Leonardo Fariña llegó a su etapa final. Fariña fue condenado a cuatro años de prisión por presunta evasión agravada en la compra de un campo de Mendoza por unos 5 millones de dólares, fondos que habrían prevenido del empresario preso Lázaro Báez.

El juicio estuvo a cargo del Tribunal Oral Penal Económico 1 integrando por los jueces Claudio Gutiérrez de la Cárcova, Jorge Pisarenco y Susana Pellet Lastra. La AFIP había pedido la pena de siete años de prisión para el arrepentido Leonardo Fariña, acusado por el delito de evasión agravada en la compra de un campo en Mendoza. En dicha instancia de alegatos, la fiscal de juicio Claudia Barbieri reclamó la pena de cuatro años.

Fariña, que declaró como testigo en el juicio, compró un campo de 3.400 hectáreas en la localidad de Tupungato, Mendoza, en diciembre de 2010 por unos 5 millones de dólares y dos años después lo vendió por 1,8 millones de esa moneda.

En su primer descargo al respecto, había afirmado que el dinero se lo había dado Lázaro Báez, sin embargo, después se desdijo y señaló que fue Carlos Molinari, hombre de negocios, quien le dio los fondos.

Durante el juicio se planteó que la operación fue simulada y que el empresario que le compró las tierras, Roberto Erusalinksy, le brindó en realidad a Fariña “una estructura económica para lavar dinero ilícito: el empresario es dueño de la sociedad Welmare Trading S.A., que le abonó al financista unos 1,8 millones de dólares”.

En su indagatoria, Fariña, procesado junto a Báez por ser parte de una maniobra que blanqueó fondos por 60 millones de dólares en la causa conocida como la Ruta del dinero K, sostuvo que el “gran encubridor de Báez” fue la AFIP bajo la gestión Ricardo Echegaray “que habla de evasión cuando fui procesado por comprar el campo a nombre del señor Báez a qué AFIP le creemos entonces”, señaló.