
El presidente Mauricio Macri le envió una carta al vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, para expresar el malestar del Gobierno por la aplicación de una tarifa aduanera del 57% contra el biodiésel argentino bajo la sospecha de subsidiar el biocombustible.
Aunque no trascendió el texto de la nota, según revelaron fuentes del Gobierno a LA NACION se decidió enviar la carta a Pence y no al presidente Donald Trump por la reciente visita que hizo al país en la que se acordó avanzar en la relación bilateral. La sanción implica un retroceso en ese propósito.
Al mismo tiempo, el Gobierno alentará que haya un acuerdo entre el sector privado de los dos países debido a que varias de las empresas exportadoras del biocombustible son las mismas que tienen plantas productoras en los EE.UU (Bunge, Louis Dreyfus o Cargill, entre otras). Para ello, según la fuente, propiciará reuniones en Washington el mes próximo.
De todas maneras, el gobierno argentino mantendrá abierta la opción de llevar el caso a la Organización Mundial de Comercio (OMC), donde el país ya obtuvo una resolución favorable por una sanción similar de la Unión Europea. Esto sucederá si el Departamento de Comercio de los EE.UU. transforma de transitorio a definitivo, a fin de este año o principios de 2018, el arancel promedio de 57% que fijó el martes pasado.
"Esperábamos un arancel de 25%, no de más del doble", dijo la alta fuente oficial para explicar la preocupación política que provocó en el Gobierno la medida de EE.UU.
El acuerdo que alienta el gobierno argentino entre el sector privado consiste en la fijación de cupos anuales de exportación. Las ventas argentinas treparon rápidamente desde 136 millones de dólares en 2014, cuando EE.UU. aceptó por primera vez el biocombustible argentino, a casi 1200 millones de dólares en 2016. En volumen se pasó de 156 mil toneladas a 1,4 millones de toneladas en ese mismo lapso.
Ese crecimiento se explica, en gran parte, por el cierre al biodiésel argentino que dispuso la Unión Europa en 2013, en represalia a la estatización de la petrolera YPF en 2012.
