Córdoba, 1 de febrero- El titular de la regional Córdoba de la Agencia Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Santiago Cataldo, ratificó que fueron encontrados en condiciones infrahumanas los 158 trabajadores rurales que prestaban funciones en un establecimiento agropecuario en Monte del Rosario, (paraje ubicado a 110 kilómetros al noreste de la capital provincial).

“Cuando llegamos nos encontramos con estos campamentos de gente en condiciones infrahumanas”, aseveró hoy a la prensa el funcionario, quien precisó que los antecedentes fueron girados a la Justicia Federal y al Ministerio de Industria, Comercio y Trabajo de Córdoba.

Cataldo destacó que ahora están cotejando las condiciones de contratación de los trabajadores, lo declarado por la empresa que los contrató y lo que manifestaron los obreros que se encontraban en el establecimiento ubicado en el departamento Río Primero..

Durante un procedimiento realizado el fin de semana por orden del Juzgado Federal Nº 3 de Córdoba (a cargo de Ricardo Bustos Fierro), personal de la AFIP relevó la situación de 158 trabajadores, 140 de los cuales se dedican al desflore del maíz, y el resto, al mantenimiento de cultivos y preparación de la tierra.

Cuando fueron consultados por los agentes de la Afip, los trabajadores manifestaron que fueron empleados por la firma Adecco Specialities, empresa que, a su vez, fue contratada por Pioneer Argentina.

Asimismo, los peones relataron que habían sido llevados a los campos desde varias localidades de la vecina provincia de Santiago del Estero (Monte del Rosario queda en el departamento cordobés de Río Primero).

Durante el relevamiento, los funcionarios de la AFIP constataron que los trabajadores rurales cobran 97 pesos diarios y que se lo pagan al finalizar todo el trabajo, previo descontarle dinero en caso de dañar las plantas que tratan.

De acuerdo con lo informado por la AFIP, ninguno de los trabajadores conocía cómo se medía el eventual daño ocasionado a las plantas, por lo que, en definitiva no sabían cuánto iban cobrar. Además, los trabajadores no tienen permitido abandonar el predio hasta que terminen el trabajo; el campo está aproximadamente a 40 kilómetros de tierra de una ruta por la que transita el transporte público.