Mauricio Macri asumió ayer la Presidencia de Argentina en un traspaso de mando atípico, marcado por la ausencia de su antecesora, Cristina Fernández, y con un llamado a la unidad de los argentinos para dejar de lado la confrontación y aprender ‘el arte del acuerdo‘.

‘Si los argentinos nos animamos a unirnos seremos imparables’, enfatizó Macri que prometió ‘llevar a la Argentina al siglo XXI’, mediante el ‘diálogo, el respeto y el trabajo conjunto’.

Inmediatamente después de jurar, Macri estrenó su cargo con un discurso de 29 minutos ante la Asamblea Legislativa, en el que su promesa de tolerancia cero a la corrupción se robó el mayor de los aplausos. En tanto, que su idea de una Justicia independiente, sin jueces macristas, cosechó el segundo mayor festejo.

De los 16 aplausos que recibió Macri, el más contundente fue cuando enfatizó: ‘Vamos a combatir la corrupción porque los bienes públicos de los argentinos son para todos los argentinos, no para el uso incorrecto de los funcionarios‘. ‘Voy a ser implacable con todos aquellos que de cualquier partido o filiación política, sean propios o ajenos, dejen de cumplir lo que señala la ley. No habrá tolerancia con esa práctica abusiva‘, afirmó.

Macri afirmó además que ‘no hay principio ideológico que pueda justificar la corrupción‘.

El mensaje contra la corrupción no es nuevo y en más de una oportunidad advirtieron que los funcionarios del Gobierno saliente deberían dar explicaciones a la Justicia si eran acusados de algún delito. Macri resaltó que la lucha contra la corrupción será una ‘intención básica del período que empieza‘.

La segunda mayor ovación llegó cuando habló de su pretensión de lograr ‘una Justicia independiente, que no tenga jueces militantes de ningún partido‘ y, fundamentalmente, cuando aclaró que ‘no son bienvenidos, si quieren ser instrumentos de nuestra gestión‘.

‘Mi total apoyo a la Justicia independiente. En estos años fue un baluarte de la democracia e impidió que el país cayera en un autoritarismo irreversible’.

En su alocución, Macri ratificó que el objetivo de su gestión será la ‘pobreza cero‘, prometió ‘universalizar la protección social para que ningún niño del país quede desprotegido‘ y ‘urbanizar las villas‘ y garantizó que ‘no se va esconder ni mentir sobre nuestra realidad‘ económica.

En ese sentido, señaló que ‘la información y los datos del Gobierno serán puestos a la luz del día, a la vista de todos‘ y sostuvo que ‘vamos a generar una transformación para que se multipliquen las fuentes de trabajo, para que haya prosperidad en donde hoy hay pobreza‘.

Macri juró a las 11.46 y después del discurso transitó en contramano la avenida de Mayo rumbo a la Casa Rosada para recibir allí los atributos de mando, la banda y el bastón presidencial. Fue el primer baño de multitudes para el nuevo jefe de Estado ya que una gran cantidad de gente lo acompañó en todo el trayecto.

El nuevo primer mandatario finalmente no utilizó un Cadillac de la Presidencia -no funciona- y saludó a los seguidores con sonrisa amplia desde una Volkswagen Touareg blanca, con el techo abierto. Dos veces rompió el protocolo al salir del Congreso y se bajó de la camioneta que lo trasladaba para tomar contacto con la multitud, que gritaba ‘¡Argentina, Argentina!‘ y ‘¡Sí, se puede; sí, se puede!‘.