Hoy cumplirá un año Luz Milagros Verón Boutet, la bebé chaqueña que fue dada por muerta al nacer y salvada por su madre en la morgue del hospital doce horas después.
La familia, que además de los padres componen otros cuatro hijos, celebrará el acontecimiento el sábado próximo en su casa del pequeño complejo de la localidad de Fontana, a siete kilómetros al oeste de Resistencia.
La "beba milagrosa", como muchos le dicen en el Chaco, había nacido de manera prematura en el hospital "Julio Perrando", de Resistencia, en el sexto mes de gestación pero, según los médicos, sin signos vitales.
"Recuerdo que nos dirigimos a la morgue con mi esposo y unos familiares, y al llegar al cajoncito, tras abrirlo y correr la tela vegetal con la que estaba tapada, Luz empezó a llorar", relató a Télam, emocionada, la mamá, Analía Boutet, quien dice que pese a lo dramático de la situación, considera ese día como el más feliz de su vida.
La familia Verón Boutet profesa una profunda fe religiosa en el proyecto evangélico "Invasión de amor" y con esas convicciones Analía interpreta el caso de su hija como "una obra de Dios, ya que Él la sacó de la morgue para que se quede en la tierra".
Otro momento emotivo que recuerda Analía fue una comunicación telefónica con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la oportunidad en la que fue recibida por el gobernador Jorge Capitanich.
La madre de Luz recuerda las afecciones que complicaron la ya crítica situación de su hija a lo largo de este año: una neumonía, una hemorragia estomacal y un paro cardíaco.
Estas situaciones determinaron su traslado a Buenos Aires para que pudiera ser atendida en un hospital de mayor complejidad.
Así fue como Luz Milagros estuvo internada diez semanas en el privado Hospital Italiano, con la cercana presencia de sus padres y hermanos.
Allí los médicos determinaron que sólo funcionaba 10 por ciento de su cerebro, como consecuencia de un grave daño neurológico.
"Muchos nos hablaron de la muerte digna, cuya ley se había sancionado recientemente, pero nos negamos rotundamente", dijo Analía.
Ya de vuelta en Resistencia y tras permanecer dos semanas en el hospital pediátrico de la capital chaqueña, la beba fue trasladada a su hogar, el cual fue remodelado completamente por el Instituto de Vivienda del Chaco, tras un compromiso asumido por el gobernador Capitanich.
El gobierno provincial además, a través del Ministerio de Salud, gestionó la llegada de un aparato VC3 de oxigenoterapia, que puede funcionar como un simple respirador artificial pero que también mezcla el oxígeno con la droga que se le recete al paciente.
Hoy Luz Milagros se encuentra estable y con asistencia permanente por parte de un equipo médico.
Analía asegura que su hija "es un gran ejemplo del amor de Dios y de Jesús, que nos da la certeza de que ellos existen y no nos abandonan".
Esperanzada, la mamá agrega que así como hace pocos días empezó a asomar el primer diente de Luz, "espero en poco tiempo ver asomar de su boca su primera sonrisa o que empiece a dar sus primeros pasos".
Planeando futuros tratamientos, quizás con células madre, la familia abrió una cuenta de ahorro en el Nuevo Banco del Chaco para recibir colaboraciones.