La Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac) acudió a la Justicia para que investigue presuntas maniobras de lavado de dinero entre empresas que orbitan el sindicato de Camionero que conduce Hugo Moyano y que implican también a su hijo Pablo Moyano. La presentación se elevó ante el juez en lo penal económico Rafael Caputo.

La Procelac, que dirige el fiscal Gabriel Pérez Barbera, pidió certificar una serie de causas en que se investiga a los Moyano para eventualmente unificarlas. Caputo delegó la investigación en la fiscal Alicia Sustaita. Además, el magistrado dispuso una serie de medidas de prueba, indicó el diario Clarín.

Entre 2014 y 2016, Patricio Farcuh y el gremio de Camioneros realizaron millonarios movimientos financieros cruzados por unos 100 millones de pesos, según un informe de la Unidad de Información Financiera (UIF).

Según la UIF, que dirige Mariano Federici, en octubre de 2014 Camioneros le vendió el hotel Reviens de Pinamar por $77 millones al Grupo Damasco SA, de Farcuh.

"Se puede conjeturar que Grupo Damasco haya sido utilizado para circular a través de ella fondos o activos pertenecientes a otras sociedades del grupo o incluso a terceros, complejizando su operatoria y haciéndola permeable para que se genere la confusión patrimonial y financiera señalada en el punto anterior", indicó la UIF.

Al mismo tiempo, OCA le donó $6,6 millones a la Asociación Mutual de Trabajadores Camioneros 15 de Diciembre, y al Club Atlético, Social y Deportivo Camioneros.

El empresario Patricio Farcuh negó haber comprado el hotel (dijo que "lo compró Alejandro Ginevra", quien también fue mencionado por la UIF) y denunció que la donación se dio cuando estuvo "de julio de 2016 a marzo de 2017 sin administración de hecho de la empresa, teniendo el derecho". "Se transfirieron los cheques cuando me usurparon la compañía", aseguró, en relación a que, según denunció por entonces, Camioneros asumió el control de la compañía.

Farcuh deslizó también que el contrato de sponsoreo que une a OCA con la camiseta de Independiente, que comenzó a mediados de 2014 por una cifra anual de US$ 2,5 millones, sigue vigente porque fue renovado por quiénes le sacaron la compañía, "Lo interesante sería saber de cuánto es el contrato de ahora, que yo no lo firmé", dijo. 

Además, el Grupo Rhuo, responsable de comprar el paquete accionario de OCA en 2013 por 60 millones de dólares, es el virtual centro de la acusación. Bajo su control, OCA comenzó a desarrollar fuertes deudas fiscales, reteniendo, según la imputación de PROCELAC, aportes a personal,"tercerizando" tareas con una cooperativa. Se lo acusa de retener otros impuestos como IVA y Ganancias, lo que llevó a la AFIP a iniciar diversas causas. La absoluta mayoría de la cifra de evasión se centra en el Grupo Rhuo.

Tras ser adquirida por Rhuo, OCA, siempre según la imputación del Ministerio Público sobre datos de la UIF, efectuó donaciones por 6,6 millones de pesos a la Mutual de Camioneros y al Club del sindicato, ambos conducidos por Pablo Moyano. Casi la mitad de esas supuestas donaciones fueron realizadas entre julio y octubre de 2016, cuando OCA SRL atravesaba supuestas dificultades para pagar los salarios de sus empleados en tiempo y forma.

No es el único caso de un cambio de fondos, un virtual "toma y daca" entre empresas ligadas a Farcuh y el conglomerado de Camioneros. Grupo Damasco S.A habría adquirido en 2014 la totalidad de las acciones de la firma Reviens S.A que meses antes habría pertenecido a la Federación y a la Mutual.

Por lo pronto, la PROCELAC sugirió un pedido de información masivo,basándose en el informe de la Unidad de Información financiera con el levantamiento del secreto bancario y fiscal como primer movimiento.