El Gobierno nacional dispuso ayer a contrarreloj dos medidas paliativas para proteger el bolsillo de consumidores y deudores de créditos UVA -ver Un respiro...-, mientras busca alternativas para suavizar el impacto de la eliminación de la quita del IVA a productos de la canasta básica que había decretado Mauricio Macri y que vencen hoy.


Aunque no es el plan que se esperaba, el presidente Alberto Alberto Fernández, resolvió ayer extender hasta el 31 de marzo la vigencia del plan de compras en cuotas "Ahora 12" y otros similares, con las mismas condiciones que las vigentes, informaron fuentes del Ministerio de Desarrollo Productivo.


En esos 90 días "se va a hacer una revisión en lo que se espera sea un contexto de mejora de la macroeconomía", agregaron las fuentes, quienes destacaron que "se va a hacer hincapié en que el beneficio alcance principalmente a los productos de origen nacional".


Todos estos planes de pagos con tarjetas de crédito en cuotas iguales vencían hoy.


Con el programa "Ahora 12", y similares, que llegan hasta 18 cuotas, los consumidores pueden adquirir los productos a un interés muy bajo o directamente sin él, si el comercio absorbe los 20 puntos de tasa acordados en el gobierno anterior.


Los rubros comprendidos por el plan son: línea blanca, indumentaria, calzado y marroquinería, materiales y herramientas para la construcción, muebles, bicicletas, motos, turismo, colchones, libros, anteojos, artículos de librería, juguetes y juegos de mesa, teléfonos celulares 4G, neumáticos, accesorios y repuestos para autos y motos, artefactos de iluminación, televisores, balnearios, pequeños electrodomésticos y perfumería.


La cartera que dirige Matías Kulfas tiene en estudio también la renovación del programa de Precios Cuidados que vence el 7 de enero, en el que el Gobierno confía en reincorporar primeras marcas.


La renovación de Precios Cuidados es un plan clave para Fernández ya que desde el 1 de enero queda sin efecto la medida de excepción que redujo a "cero' la alícuota del Impuesto al Valor Agregado (IVA) para los alimentos de primera necesidad que impulsó el expresidente Mauricio Macri en agosto con el objetivo de que la devaluación del peso no afectara tanto en los bolsillos de las personas de menores recursos.


El Gobierno actual no prevé renovarla, según indicaron fuentes oficiales, y de acuerdo con la estrategia del gabinete de Alberto Fernández, las necesidades de los sectores más postergados serán atendidos mediante tarjetas de compra de alimentos, mientras que se mantiene el diálogo con las empresas formadoras de precios.


La idea que más seduce al Presidente es una devolución parcial del IVA de hasta los 700 pesos mensuales a jubilados y planes sociales, incluso hasta la Tarjeta Alimentar que ya fue distribuida en Entre Ríos y esperan seguir entregando en los próximos días en el resto de las provincias.


Los economistas cercanos a Fernández han sido críticos de la reducción del IVA "a cero' en los alimentos de primera necesidad, debido a que al ser de alcance generalizado beneficiaba tanto a los sectores más pobres como a los más ricos. 


Lo cierto es que se se elimina este beneficio también lo sufrirá la clase media trabajadora que verá un aumento de los precios de entre 10,5 y 21 por ciento. 


Los productos con IVA cero son pan, leche, aceite de girasol y mezcla, pastas secas, arroz, harinas de trigo, polenta, rebozador y pan rallado, yerba mate, mate cocido, té, conservas de frutas, hortalizas y legumbres, yogur y azúcar.


Por el riesgo de un rebrote de la inflación por la vuelta del IVA el Gobierno mantiene intensas negociaciones con los empresarios supermercadistas para que ellos absorban los aumentos. 

Peajes sin subas

  • El presidente Alberto Fernández, decidió frenar los aumentos y congelar el importe de las tarifas de peaje en toda la traza de jurisdicción nacional que debían aplicarse desde enero próximo y que habían sido dispuestos por la gestión de Mauricio Macri, informó ayer Presidencia en un comunicado. 

> Un respiro para los deudores de UVA

El Banco Central acordó con el Ministerio de Desarrollo extender durante enero los beneficios para compensar el aumento en las cuotas de los tomadores de créditos hipotecarios ajustables por Unidades de Valor Adquisitivo (UVA).


El beneficio tenía fecha de vencimiento el 31 de diciembre, e implica el mantenimiento de la cuota al valor de agosto 2019, precisó la entidad monetaria en un comunicado. 


La medida fue dispuesta en septiembre pasado por un plazo de cuatro meses, en el marco de la crisis económica que atraviesa el país. El Banco Central añadió que, en vistas de lo establecido por el artículo 60 de la ley 27.541, "se conformará una comisión para evaluar el desempeño y las consecuencias del sistema de préstamos ajustables por UVA para la adquisición de viviendas, sus consecuencias sociales y económicas, atendiendo al criterio del esfuerzo compartido entre acreedor y deudor".