El Gobierno se prepara para dar pelea en la Justicia y eventualmente ponerle freno a los “desmedidos” aumentos en las cuotas de la medicina prepaga que van desde el 100 y hasta el 500 por ciento en algunos casos, luego de que el propio ejecutivo de Javier Milei firmó la desregulación para este rubro.
Por lo pronto, ya pidió a las empresas del sector, a través de la Superintendencia de Servicios de Salud, que presenten los planes de cobertura ofrecidos a sus beneficiarios y los valores de las cuotas actualizados frente al organismo cuando en enero las había relevado de esa obligación. Pero no es lo único: el Gobierno busca congelar los aumentos de los próximos meses y analiza dos medidas para ir a la Justicia denunciando cartelización entre las principales empresas del rubro y abuso de posición dominante.
Apuntan especialmente al empresario Claudio Belocopitt, dueño de Swiss Medical Group.
Fuentes de la Secretaría de Comercio confirmaron que están aguardando el dictamen que viene trabajando Defensa de la Competencia, quien está investigando el tema. Una vez cursado el dictamen donde trabajan en definir si hay indicios de una coordinación entre las prepagas para aumentar el precio, desde Comercio definirán los pasos a seguir aunque no confirmaron una fecha tentativa.
En principio, el Poder Ejecutivo pretende que las compañías de servicios médicos congelen sus tarifas por al menos dos meses para amortiguar el impacto en la inflación. En promedio, los precios treparon hasta 154% en lo que va de 2024: 40% en enero, 27% en febrero, 20% en marzo, y hasta 19% en abril, según las distintas empresas. Esto es, tres veces por encima de la inflación del período, que rondará el 50% en el acumulado enero-marzo, según estimaciones. Aunque Hay casos en que los aumentos son muy superiores.
Lo que ve la Casa Rosada es que el problema que hoy existe en el sector es que hay un actor importante dentro del mercado que es Claudio Belocopitt, que tiene alineados a todos los demás integrantes del rubro y que es quien coordinaría una presunta “cartelización” y el abuso de precios que ha generado múltiples denuncias de afiliados a título personal ante la Justicia.
Para el Gobierno de Milei, Belocopitt era socio del gobierno anterior (fundamentalmente con Sergio Massa), con quien acordó congelamientos de cuotas a cambio de subsidios que habría cobrado durante la pandemia (ATP y Repro) al mismo tiempo que expandía su negocio ya que compró el Instituto Cardiovascular y parte de Medicus, otra empresa de medicina prepaga. Por eso, lo apuntan como el autor material e intelectual de toda la jugada de los últimos meses que generó aumentos en las cuotas de los afiliados por el doble de la inflación de este primer trimestre.
“Las prepagas le están declarando la guerra a la clase media”, había alertado la semana pasada el ministro de Economía, Luis Caputo.